Madrid, 14 jul (EFE).- El presidente de la sociedad de gestión de activos, Sareb, Jaime Echegoyen, ha dicho hoy que el ritmo de liquidación de los activos "va algo despacio", por lo que el conocido como "banco malo" necesitará todo el tiempo que le fue concedido de vida, es decir, un periodo de quince años.
"Tenemos la intención de acabar" este periodo, aunque si fuera antes, mejor, ha precisado el presidente de Sareb durante un encuentro informativo organizado por Europa Press, en colaboración con Servihabitat, en el que ha señalado que espera que el Estado no pierda nada con la sociedad y que recupere la inversión.
Echegoyen, que ha dicho que Sareb no está pensada, ni está preparada, para llevar a cabo una gran venta, ha asegurado que 2014 marcó un antes y un después en el sector, ya que existen claros signos de estabilización, que no de recuperación.
Y es que, según ha explicado, se ha producido una estabilización de los precios de las viviendas en algunas zonas de España, algo que también ha ocurrido con el suelo, que en el caso de Sareb ha doblado las operaciones y ha multiplicado su valor por tres.
"Lo que se ha hecho en Sareb en estos dos años y medio funciona", ha dicho Echegoyen, para quien la sociedad es "referencia en el mercado internacional".
Y es que, ha explicado, otros países se están acercando para copiar el modelo Sareb.
Preguntado por si podría producirse una nueva burbuja en el crédito, Echegoyen ha indicado que cree firmemente que los banqueros "han aprendido de los errores".
