El presidente George W. Bush pidió el lunes el apoyo de su población a la guerra en Irak y prometió que Estados Unidos encontrará al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, cuando se cumple el quinto aniversario de los atentados del 11 de septiembre.
Bush, en un discurso televisado dirigido a la nación desde el Despacho Oval de la Casa Blanca, no dio indicios de que las fuerzas estadounidenses estuvieran más cerca de capturar o matar a Bin Laden, quien fraguó los atentados con aviones comerciales contra Nueva York y Washington en 2001.
"Aunque se hayan cometido errores en Irak, el peor error sería creer que si nos retiramos, los terroristas nos dejarían tranquilos", dijo Bush.
"La seguridad de Estados Unidos depende del resultado de la batalla en las calles de Bagdad", agregó.
Criticado por algunos demócratas por no capturar a Bin Laden cuando hubo ocasión a finales de 2001, Bush renovó su promesa de perseguir al esquivo líder espiritual de Al Qaeda.
"Osama bin Laden y otros terroristas están todavía escondidos. Nuestro mensaje a ellos es claro: No importa cuánto tiempo lleve, Estados Unidos los encontrará, y los llevaremos ante la Justicia", dijo.
Bush insistió en que es esencial que Estados Unidos siga en Irak, cuya situación es descrita por Bin Laden, según dijo, como la "Guerra del Tercer Mundo".
"Si cedemos Irak a hombres como Bin Laden, nuestros enemigos se verá envalentonados (...) obtendrán un nuevo refugio", agregó.
Bush dijo que la guerra contra el terrorismo estaba apenas en sus "primeras horas" y la describió como una "lucha por la civilización".
"Ganar esta guerra requerirá los esfuerzos decididos de un país unificado. Y debemos poner a un lado las diferencias y trabajar juntos para pasar esa prueba que la Historia nos ha dado. Derrotaremos a nuestros enemigos", agregó.