
La Guardia Urbana de Barcelona ha imputado a tres personas por estafar a familias que se encontraban en riesgo de exclusión social y que vivían situaciones delicadas, según ha informado el cuerpo este miércoles en un comunicado.
Los agentes tuvieron conocimiento de que un grupo de personas ocupaban viviendas de forma ilegal y, posteriormente, las alquilaban a precios bajos a familias sin recursos.
La llamada de un ciudadano al 092 que alertaba de una posible ocupación ilegal en el barrio de la Teixonera, en Horta-Guinardó, desencadenó la operación en marzo.
Según la Urbana, los autores de estas estafas se dedicaban a captar a personas en estado de necesidad, cambiaban los cerrojos de los pisos entregando llaves a las víctimas junto a un contrato de alquiler, siendo el arrendatario que figuraba en el contrato una persona a la que se había usurpado la identidad.
Para cometer las estafas, buscaban a individuos necesitados, localizaban viviendas susceptibles de ser ocupadas, captaban a víctimas potenciales, falsificaban documentos y cobraban los alquileres.