
Los inversores sacaron de España 800 millones de euros en febrero, doce veces menos que las salidas por importe de 9.600 millones de euros registradas en el mismo mes de 2014, según la balanza de pagos que publica el Banco de España.
La salida o entrada de capitales es un saldo que resulta de tener en cuenta lo que los inversores españoles invierten fuera del país y lo que los extranjeros destinan a España en ese mismo mes.
En el desglose de los datos, el saldo de 800 millones que salieron de España en febrero procede, principalmente, de 400 millones de euros por inversiones directas, 8.500 millones por inversiones en cartera y otros 500 millones por derivados financieros.
A su vez, estas salidas se vieron prácticamente compensadas por la entrada de 8.500 millones de euros por otras inversiones (préstamos, repos y depósitos, principalmente) y 300 millones de euros por inversiones directas.