El Banco de Japón (BOJ) decidió hoy mantener los tipos de interés en el 0,50 y rebajó la previsión de crecimiento anual para la economía japonesa del 1,5% al 1,2%. El mercado ya esperaba que la institución financiera nipona revisara a la baja su pronóstico para el presente ejercicio, debido a la elevada inflación del país.
Tras una reunión de dos días celebrada en Tokio, la Junta del banco central ha decidido mantener el tipo interbancario intacto, al 0,5%, por décima séptima semana consecutiva.
Lo que sí ha modificado el banco central nipón han sido las cifras del crecimiento que se espera para 2008. En esta ocasión, ha rebajado el avance al 1,2%, desde el 1,5% anterior. Ya en el mes de abril el BOJ anunció un crecimiento anual del 1,5%, lo que ya suponía un descenso con respecto al 2,1% estimado en octubre.
El banco central apuntó a las presiones inflacionistas, provocadas por los precios del petróleo y otras materias primas, como causa del recorte en su previsión de crecimiento anual para la economía japonesa. De hecho, el BOJ ha elevado su previsión de inflación para el año fiscal desde el 1,1% que había estimado el pasado mes de abril hasta el 1,8%.
El informe del BOJ se suma a las pruebas de que la economía japonesa se ha ralentizado desde la crisis provocada en los mercados internacionales por las hipotecas subprime.
