Si es usted el propietario de una pequeña empresa y su volumen de ingresos no supera los 6 millones de euros anuales, no se preocupe por los problemas con el fisco y duerma tranquilo. Hacienda somos todos, pero según denuncian los técnicos de la Agencia Tributaria, la vigilancia que se hace no puede ser igual con unos que con otros. Gestha, el sindicato más representativo de este colectivo profesional, asegura que hay más de 57.000 sociedades que llevan al menos 20 años sin ser inspeccionadas por Hacienda.
El vicepresidente de esta organización, Jesús Montero, asegura que el problema radica en "una grave falta de profesional cualificado" y advierte de que si no se toman medidas de forma urgente "España podría tener que enfrentarse en breve a un gran escándalo fiscal". Los técnicos han denunciado ya este problema en reiteradas ocasiones tanto a la Agencia Tributaria como al ministro de Economía, Pedro Solbes, pero, según dicen, "no ha habido ningún tipo de respuesta".
Solbes descartó ayer, además, una amnistía fiscal para regularizar el dinero negro, especialmente los billetes de 500 euros. "Se puede regularizar ya todos los días yendo a la Agencia Tributaria y haciendo una declaración complementaria", aseguró.
Más plantilla
Tanto los técnicos como los inspectores coinciden en que los 28.000 efectivos con que cuenta ahora Hacienda no son suficientes y reclaman más medios. Y no sólo por el número de inspectores, que se eleva a tan sólo 1.200, de los que la mitad están realizando labores de vigilancia. "Es necesario incrementar las plantillas de administrativos, agentes tributarios y subinspectores. Las promesas de nuestras autoridades tributarias nunca se han llevado a cabo", aseguran los dos colectivos.
El problema se agrava además porque, según dicen, la Ley Antifraude no ha logrado destapar las grandes bolsas de economía sumergidas existentes en España debido a que el fisco ha destinado la mayor parte de las acciones de inspección a la comprobación de empresas que facturan más de 6 millones de euros, cuando en realidad el tejido empresarial español está integrado en su gran mayoría por pymes que, por su dimensión y resultados, no tienen obligación de ser auditadas.
Hacienda estaría centrando sus esfuerzos en el control de los incumplimientos fiscales derivados de las rentas del trabajo y los asalariados y se habría olvidado así de otros problemas más graves. Para los técnicos de Hacienda, el sector con un mayor nivel de fraude sigue siendo, sin duda, el inmobiliario. A pesar del estallido de la burbuja y de la grave crisis a la que se enfrentan muchas empresas relacionadas con el ladrillo, la evasión fiscal en este mercado rondaría ya los 8.600 millones de euros anuales.
Luchar contra el fraude
Y, de esa cifra, más de la mitad se concentraría sólo en Cataluña, Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana, según los datos de un informe de Gestha elaborado a finales de 2007 y que sirve como balance del primer año de aplicación de la Ley de Medidas para la Prevención del Fraude Fiscal, en el que se han investigado 6.516 empresas del sector inmobiliario, un 2,1 por ciento del total.
Para los técnicos de Hacienda, la nueva legislación para luchar contra el fraude no ha contribuido de hecho a frenar realmente las operaciones inmobiliarias de carácter especulativo y, por tanto, su repercusión sobre la vivienda, pese a la caída de los precios se sigue produciendo.
Con el fin de evitar estas prácticas, Gestha propone considerar transmisiones especulativas de inmuebles todas las que hayan permanecido en el patrimonio del vendedor menos de tres años, siempre que no ocurra una circunstancia objetiva que obligue al cambio de domicilio. Además, los técnicos creen que las agencias inmobiliarias deberían informar al fisco de las operaciones de intermediación.