MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
Marsans, uno de los grupos turísticos españoles más interesados con hacerse con el control de Spanair, aseguró hoy que seguirá con su plan de crecimiento pese a no haber logrado la compra de la aerolínea, aunque prevé "meses de inestabilidad" hasta que SAS "no se vuelva a plantear que hace falta una solución para Spanair", según señalaron a Europa Press fuentes de la compañía.
Desde Marsans consideraron que es "muy legítimo que el vendedor piense que no se dan las condiciones para vender", no obstante recalcaron que la solución propuesta por el grupo presidido por Gonzalo Pascual era "la mejor".
En este sentido, dichas fuentes recordaron que los accionistas de Marsans fueron fundadores de Spanair y recalcaron que el grupo turístico tenía "interés e ilusión" en quedarse con la aerolínea. Asimismo, apuntaron que la compañía tiene previsión de crecimiento y "hubiera podido asumir parte de un posible sacrificio si hubiera sido necesario".
No obstante, recalcaron que SAS deberá definir sus intenciones, sobre todo con los sindicatos, teniendo en cuenta un previsible plan de reestructuración que el grupo escandinavo tendrá que poner en marcha para conseguir que Spanair salga de 'números rojos'. A este respecto, CCOO ya ha asegurado su intención de realizar paros en el mes de julio ante la "inestabilidad" que están viviendo los trabajadores.
PLANES DE MARSANS
Marsans presentó un plan de crecimiento en Barcelona hace ya más de un año que "encajaba" con una posible adquisición de Spanair, por la que el grupo de Gonzalo Pascual --que además ocupó la presidencia de Spanair-- fue el primero en presentar una oferta. La entrada de Iberia en la puja aceleró su retirada, pero Marsans siguió negociando con empresarios catalanes para tratar de hacerse con el control de la aerolínea del grupo SAS.
No obstante, fuentes del grupo turístico indicaron que su plan de crecimiento previsto en el negocio aéreo "sigue en pie", teniendo en cuenta el pedido de 73 aviones realizado el pasado mes de octubre al constructor aeronáutico europeos Airbus.
La compañía ha destinado 7.000 millones de dólares (4.900 millones de euros) a la compra de cuatro A380, diez A350, 42 aviones A320 y cinco A330, que se suman a las doce unidades que ya habían pedido del mismo modelo en diciembre de 2006. Los aviones tienen como destino las flotas de Aerolíneas Argentinas y Air Comet, y empezarán a operar en un periodo comprendido entre este año y 2014.
Con estos nuevos aviones, Marsans potenciará el 'hub' --centro de interconexión de vuelos-- de Barcelona-El Prat, después de que les fuera asignada la nueva Terminal Sur del aeródromo barcelonés. A este respecto, la compra de Spanair les hubiera ayudado a alimentar el 'hub' con pasajeros desde el resto de España.
Los planes del grupo pasan por unir la Ciudad Condal con las principales ciudades latinoamericanas, entre las que destacan Buenos Aires, Lima, Quito y Guayaquil y más a largo plazo, Bogotá y Santiago de Chile. Air Comet ya vuela a Buenos Aires desde Barcelona, pero prevé incrementar el número de frecuencias.