
La Unión Europea ha pedido a España y a Reino Unido que actúen para investigar las posibles prácticas de contrabando de tabaco y blanqueo de capitales y pongan fin a estas actividades delictivas. Hacienda investigará a las tabaqueras por contrabando desde Gibraltar. Hacienda investigará a las tabaqueras por contrabando desde Gibraltar.
Así se indica en una carta enviada por la Oficina Europea de la Lucha Contra el Fraude (OLAF) al departamento de Aduanas español a la que han tenido acceso diversos medios.
En dicho documento se señala que "hay motivos para creer que los delitos de contrabando de tabaco y blanqueo de capitales, afectando a los intereses financieros o de otra índole, de la Unión Europea, han sido cometidos" en Gibraltar.
España presentó una denuncia sobre el presunto papel del Peñón como base para actividades ilícitas y evasión fiscal, una cuestión acerca de la que ahora se pronuncia Bruselas. Según se recoge en su informe, elaborado a partir de los datos recabados tras las visitas de sus inspectores a Gibraltar, la OLAF reconoce que existen indicios contrabando y blanqueo de capitales.
Por ello, insta a la Fiscalía española a iniciar "las correspondientes diligencias judiciales" y pide al "representante permanente del Reino Unido ante la Unión Europea" que transmita a las autoridades gibraltareñas la recomendación de emprender también las correspondientes acciones legales.
El pasado mes de junio, el Peñón anunció las primeras medidas para tratar de poner fin a la compraventa ilegal de tabaco, respondiendo así a las reclamaciones del Gobierno español y a la presión de empresas como la británica Imperial Tobacco.
Las autoridades gibraltareñas preparan una Propuesta de Enmienda a la Ley del Tabaco por la que las tiendas y los bares sólo podrán vender como máximo un cartón de tabaco por persona al día, lo que equivale a diez cajetillas, frente a los cinco cartones que se pueden adquirir actualmente. Asimismo, se otorgará poder al Administrador de Aduanas para suspender cualquier licencia de venta.
El contrabando de tabaco es una práctica que causa cada año un agujero en las arcas del Estado español de más de 1.000 millones de euros.