Indígenas del este boliviano tomaron las instalaciones de una estación de la compañía Transierra y amenazaron con cerrar las válvulas del gasoducto que administra y por el cual Bolivia exporta gas al Brasil, según el diario boliviano El Deber.
Los miembros de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG) tomaron el viernes la estación que controla el gasoducto Yacuiba-Rio Grande, en demanda del cumplimiento de un acuerdo firmado en julio de 2005 por el cual esta empresa debería entregarles 9 millones de dólares para ejecutar un Plan de Desarrollo Indígena, por derechos de servidumbre de paso del gasoducto.
La compañía Transierra está conformada por capitales de la brasileña Petrobras, la hispano-argentina Repsol YPF y la francesa Total.
Los pueblos guaraníes habían advertido el jueves con tomar medidas para forzar al cumplimiento del convenio y dijeron estar dispuestos a cerrar el gasoducto a Brasil y bloquear la carretera que une Bolivia con el norte argentino.
El Gobierno boliviano intervendrá hoy y se reunirá en Charagua, a 32 kilómetros de la estación de Transierra, con representantes de Transierra y de la Asamblea Guaraní para intentar encontrar una solución.
Por su parte, Transierra aclaró que la compensación de 9 millones de dólares por daños ambientales debería ser desembolsada en los próximos 20 años.
"Aún cuando se demostró predisposición al diálogo y el compromiso de cumplir a cabalidad el convenio, se ha encontrado una posición intransigente y unilateral del pueblo guaraní", dice un comunicado de la empresa.