
El Fondo Monetario Internacional (FMI) desbloqueó hoy el desembolso de 910 millones de euros, el décimo y uno de los últimos tramos del plan de rescate a Portugal, que suma ya 25.100 millones de euros.
En un comunicado el FMI indicó que la revisión de la ejecución de las reformas llevadas a cabo por Portugal permite el desbloqueo de este nuevo tramo, dentro del compromiso del Fondo en el programa conjunto con la Comisión Europea y el Banco Central Europeo (BCE) por valor de 78.000 millones de euros (103.000 millones de dólares). El programa de rescate, de una duración de tres años, cuenta con una contribución total del Fondo por valor de unos 27.510 millones de euros (unos 35.000 millones de dólares).
La subdirectora gerente del FMI, Nemat Shafik, aseguró que "la implementación por parte de las autoridades portuguesas ha sido ejemplar, pese a los recientes contratiempos legales", en referencia a las medidas presupuestarias pensadas para compensar la invalidación por parte del Constitucional de parte del recorte de las pensiones. Pese a ellos, Shafik lamentó que se mantenga el alto desempleo y advirtió de que los riesgos permanecen altos. De nuevo, el FMI recomendó no reducir el ritmo de consolidación fiscal y de reformas estructurales.
Las autoridades de Portugal solicitaron la asistencia financiera internacional en abril de 2011 y un mes después firmaron el acuerdo en el que se comprometieron a aplicar un severo programa de ajustes y reformas como contrapartida por la ayuda. Portugal espera poder salir del rescate en junio y conseguir financiarse de manera autónoma con emisiones de deuda.
A poco de abandonar el rescate, la discusión se centra ahora en saber si Portugal recurre a algún mecanismo de apoyo comunitario para acompañar su regreso a los mercados de deuda a largo plazo -en forma de línea de crédito preventiva- o si seguirá los pasos de Irlanda y optará por salir sin ningún tipo de ayuda.