El miembro de la ejecutiva del BCE, Benoît Coeuré, ha señalado hoy que los bancos no necesitarán una nueva inyección de liquidez a largo plazo (LTRO), una herramienta clave de la institución para luchar contra la crisis de deuda y la recesión en la Eurozona.
"Puede darse el caso que las facilidades de liquidez permanentes sean suficientes para garantizar un nivel adecuado de liquidez, y de no ser así entonces podríamos actuar", ha señalado el responsable del BCE en una entrevista.
"Los riesgos imprevistos son ahora menores que hace seis meses, así que en ese sentido estamos confiados en la recuperación", ha asegurado el francés.
Los LTRO (siglas en inglés de Operaciones de Refinanciación a Largo Plazo) fueron unas inyecciones de liquidez que puso en marcha el BCE cuando el grifo de crédito se cerró para la banca europea hace dos años. Una medida que quería suplir la falta de interbancario en plena crisis.
El miembro del BCE ha remarcado que pese a que no crea necesarias estas medidas, el banco seguirá comprometido con la liquidez a través de operaciones a corto plazo hasta 2015.