Teresa Bouza
Washington, 4 ago (EFECOM).- El dato de desempleo de julio publicado hoy en EEUU confirma la tendencia a la desaceleración en la primera economía mundial y aumenta la posibilidad de que la Reserva Federal mantenga los tipos de interés sin cambios la próxima semana.
Las cifras sobre desempleo divulgadas hoy por el Departamento de Trabajo señalan que EEUU creó sólo 113.000 nuevos puestos de trabajo en julio, lo que dejó la tasa de desempleo en el 4,8 por ciento, el nivel más alto de los últimos cinco meses.
La cifra es inferior a los 124.000 trabajos creados en junio y supone el nivel más bajo desde mayo, cuando la economía generó 100.000 trabajos.
El consenso de economistas había vaticinado un aumento de 145.000 puestos y adelantado que el desempleo quedaría en el 4,6 por ciento.
Por lo demás, el indicador se sitúa en línea con otros datos publicados en las últimas semanas que muestran señales de agotamiento en el país que hasta ahora ha sido el principal motor económico global.
El crecimiento del segundo trimestre -que aumentó un 2,5 por ciento, muy por debajo del 5,6 por ciento de los tres primeros meses del año- es una de las señales más claras de ese enfriamiento.
"La economía ha perdido claramente empuje y puede que no consiga crecer ni siquiera un 2,5 por ciento en el tercer trimestre", dijo a EFE Ken Goldstein, economista del centro de estudios The Conference Board, con sede en Nueva York.
Las cifras sobre la mesa llevan a algunos expertos a pensar que la Fed pondrá fin el martes a la campaña de endurecimientos monetarios que arrancó en el 2004 y que se tradujo en 17 subidas consecutivas de los tipos de interés, hasta el 5,25 por ciento.
"La menor creación de puestos de trabajo indica que los tipos de interés están ralentizando la expansión económica y la inflación disminuirá en los meses venideros", dijo Peter Morici, profesor de Economía en la Universidad de Maryland.
"La Reserva Federal (Fed) no debería subir los tipos de interés cuando se reúna el próximo 8 de agosto", aseguró Morici.
El comportamiento del mercado de bonos y la depreciación del dólar, que perdía terreno durante las primeras horas de hoy frente a las principales divisas mundiales, apuntan también en esa dirección.
Aun así, no falta quien señale que el enfriamiento económico se produce en un ambiente de calentamiento inflacionario y que eso bien podría llevar a la Fed a apretar de nuevo las tuercas.
En ese sentido, el informe sobre desempleo difundido hoy refleja, por ejemplo, un incremento de los salarios (un 0,4 por ciento más altos de media por hora trabajada), una buena noticia para los empleados, pero no tanto para la Fed.
El dato, según Ken Mayland, presidente de la consultora ClearView Economics, aumenta los temores a una espiral de precios.
El experto destaca además que "el informe de hoy debilita al dólar (...), lo que aumentará el precio de las importaciones y hace que a la Fed le resulte mucho más difícil controlar la inflación".
Aún así, Mayland considera "simplista" pensar que la Fed actuará en función de lo ocurrido hoy y anticipa que la explosiva combinación de menor crecimiento e inflación hará "sudar" a Ben Bernanke, el presidente de la Fed, cuando tenga que decidir si mover o no ficha el martes que viene.
Bernanke dejó claro durante su comparecencia ante el Congreso el mes pasado que es consciente del dilema que afronta, al expresar su preocupación con la subida de los precios y manifestar, al mismo tiempo, su esperanza en que la economía sea capaz de capear esas presiones inflacionarias.
El mensaje del mandamás de la Fed del pasado 19 de julio fue recibido entonces con alzas en Wall Street, que interpretó que Bernanke estaba anticipando el final de la subida de tipos.
El próximo martes se sabrá si Wall Street estaba o no en lo cierto. EFECOM
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