El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha admitido este martes que la subida de la luz nunca es una buena noticia, tras conocerse que se producirá un incremento en la factura del consumidor del 3,1% desde el 1 de octubre, pero ha asegurado que intervenir desde el Estado en el precio sería "pan para hoy, hambre para mañana".
En declaraciones a los medios al inaugurar al Salón Náutico de Barcelona, ha admitido que el resultado de la subasta que fija el coste de la energía dentro de la Tarifa de Último Recurso (TUR), realizada para determinar el precio para el cuarto trimestre, "no será bien recibido", aunque sea el sistema establecido desde hace tiempo en el sector eléctrico.
Soria ha recordado que "en otras ocasiones, cuando, fruto de la subasta, el precio de la luz aumentaba, algunos gobiernos lo que hacían artificialmente era disminuir el otro componente, que se llama de peaje".
"El único problema que tiene esto último es que, cuando disminuye, aumenta el déficit del sector eléctrico, y eso es pan para hoy y hambre para mañana porque se acaba pagando por todos los consumidores", ha advertido.