
WASHINGTON, 2 (Reuters/EP) El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió ayer un nuevo paquete de ayuda internacional de 770 millones de dólares (más de 498 millones de euros) para aliviar los efectos del alza global en los precios de los alimentos.
Bush, al expresar su preocupación por el incremento de los precios mundiales de los alimentos, que están propiciando levantamientos en los países más pobres como Haití o Burkina Faso, prometió que Estados Unidos tomará el liderazgo de la lucha contra el hambre, que amenaza con hacer estragos en los países es desarrollo.
"Con la nueva financiación internacional anunciada hoy estamos mandando un claro mensaje al mundo de que América liderará la lucha contra el hambre en los próximos años", afirmó el presidente. "Creo que se puede hacer más". "Por ello, estoy pidiendo al Congreso que proporcione 770 millones de dólares adicionales para ayuda alimentaria y programas de desarrollo", resaltó.
Esto ayudará a "mejorar la habilidad de los países en desarrollo para alimentarse a sí mismo", comentó el máximo director del presupuesto, Stephen McMillin. Si se aprueba por el Congreso, los fondos podrían hacerse efectivos el 1 de octubre.
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