
Hasta 2015 no se logrará el grueso del ahorro que el Gobierno de Mariano Rajoy espera conseguir con la reforma de la Administración local, en concreto, el 64% del total, 5.127 millones de euros, que procederán de la eliminación de los llamados gastos impropios de los ayuntamientos, de la reducción del sector público local y del traspaso de la gestión de ciertos servicios a las diputaciones provinciales.
Así figura en la memoria del impacto que tendrá la ley cuando por fin entre en vigor, y que acompaña al proyecto enviado por el Gobierno al Congreso para su tramitación a partir de septiembre, según EP. El Ejecutivo popular confía en que la norma se apruebe este año y entre en vigor en 2014.
A tenor de los cálculos realizados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, la aplicación de la reforma local significará un ahorro de 8.016 millones entre 2014 y 2019, que es el plazo de implantación de las novedades.
El Gobierno insiste en que es un cálculo prudente, que podría verse incrementado, y que de hecho, en 2012 los municipios ya ahorraron el 9,4% -4.319 millones- sobre 2011, según datos de todas las CCAA, salvo Navarra, País Vasco, Ceuta y Melilla. Hacienda detalla que los gastos de personal bajaron el 12,8%.
El 50%, gastos impropios
De los más de 8.000 millones que prevé de ahorro el Gobierno, casi la mitad se logrará eliminando el gasto impropio, el que realizan los ayuntamientos en aquellas competencias que no son suyas. La previsión oficial es que los ayuntamientos resuelvan este asunto en los tres primeros años de la ley -de 2014 a 2016-, con un ahorro total de 3.735 millones.
Además, la devolución a las CCAA de las competencias en educación, servicios sociales y sanidad permitirá a los municipios ahorrar 837 millones; la aplicación de esta novedad se prevé a más largo plazo, de 2015 a 2019.