El Índice de Precios al Consumo (IPC) chino, principal indicador de la inflación, subió un 2,7% interanual durante el pasado mes de julio, informó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas.
El crecimiento de los precios es el mismo que se registró en junio y se mantiene por debajo del límite máximo marcado por Pekín para este 2013, situado en el 3,5%.
El organismo, que en un comunicado aseguró que los precios al consumidor "se mantuvieron relativamente estables" en julio, atribuyó el 2,7 por ciento de inflación interanual al crecimiento de los precios de los alimentos, que aumentó un 5 por ciento.