La balanza comercial de Estados Unidos arrojó un déficit de 34.200 millones de dólares en junio, por debajo de los 44.100 millones de mayo. Se trata del agujero más pequeño desde octubre de 2009.
El dato ha sorprendido positivamente al mercado. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban de media un déficit de 43.500 millones de dólares.
Este déficit comercial en junio es resultado de unas importaciones que bajaron un 2,5%, hasta una cifra ajustada estacionalmente de 225.400 millones de dólares, y unas exportaciones que subieron un 2,2%, hasta 191.200 millones de dólares.
La reducción en el déficit comercial contribuye al crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), con lo que la reducción de junio podría añadir impulsar el dato de crecimiento del segundo trimestre, cuya primera estimación se situó en el 1,7%.
"Esto es una excepcional buena noticia", ha señalado Millan Mulraine, economista de TD Securities USA en Nueva York. "Esto podría impulsar el crecimiento del PIB en un 1%. Aunque estos niveles de déficit comercial son muy difíciles de mantener dado el débil crecimiento mundial", añade.
EEUU crece un 1.7% en el segundo trimestre
