El precio de la vivienda en España, que acumula un descenso del 24,3% desde finales de 2007, continúa "significativamente sobrevalorado", según la agencia de calificación crediticia Fitch, que advierte de los riesgos a los que se enfrenta el mercado inmobiliario español por el inventario de viviendas a la venta y el elevado nivel de paro entre la población.