El Gobierno británico aprobó hoy un aumento del salario mínimo del 1,9% hasta fijarlo en 6,31 libras (7,3 euros) la hora, que se estima beneficiará a unos 1,7 millones de trabajadores en el Reino Unido.
El incremento, correspondiente a empleados mayores de 21 años, entrará en vigor a partir del próximo octubre y responde a las recomendaciones que el Gobierno ha recibido de un grupo de expertos del Ministerio británico de Empresa.
No obstante, el aumento se sitúa por debajo del actual índice de inflación interanual, del 2,8%, y ha sido bien recibido tanto por la Confederación de la Industria Británica, que agrupa a las grandes empresas, como por la Confederación de Sindicatos.