El consejero delegado de la empresa dice que quieren quedarse en el país, pero advierte de que la importancia de una regulación "razonable"
MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El consejero delegado de NESTLE (NESN.CH) Peter Brabeck-Letmathe, ha asegurado que la compañía quiere quedarse en Suiza, pero ha criticado que el entorno político y regulatorio en el país es "cada vez más complicado", en referencia al referéndum convocado por iniciativa popular para limitar los salarios en las empresas de manera que eviten las grandes diferencias entre los más bajos y los más elevados.
Los suizos votarán en referéndum, previsiblemente después del verano, la iniciativa popular '1:12 Por unos salarios justos', presentada por las juventudes socialistas del país en 2011, que propone fijar en la Constitución que la remuneración más elevada en una empresa no debe ser más de doce veces superior a la más baja.
En su intervención en la Junta General de Accionistas de la compañía, Brabeck-Letmathe alertó de que el entorno político y regulatorio para las compañías cotizadas en Suiza se está volviendo "más complicado", y apostó por encontrar "un nuevo consenso entre economía, política y sociedad".
"Las estabilidad a largo plazo y la previsibilidad del marco legal, así como una regulación razonable, que son requisitos cruciales de la actividad empresarial, están siendo constantemente cuestionados", aseguró.
En este contexto, el consejero delegado de Nestle defendió que es necesario que todas las partes hagan esfuerzo para "profundizar en el entendimiento mutuo y encontrar el equilibrio adecuado".
"Nestlé quiere quedarse en Suiza. Nestlé --la dirección y los empleados- quieren seguir sintiéndose bienvenidos en este país y contribuir a su éxito, no sólo hoy, sino también en el futuro", afirmó.
INICIATIVA MINDER.
Asimismo, Brabeck-Letmathe hizo referencia a la 'Iniciativa Minder', aprobada en referéndum con el voto a favor del 67,9% de los suizos, que permite los accionistas de las compañías cotizadas forzar una votación y vetar las retribuciones que se asignen a sí mismos los directivos de la empresa.
La medida, que tendrá forma de una enmienda constitucional, fue aprobada a principios del pasado mes de marzo tras siete años de campaña liderada por el antiguo empresario y político Thomas Minder.
"Ahora es crucial que respetemos la decisión del electorado suizos y encontremos soluciones legislativas prácticas que salvaguarden el atractivo a largo plazo de Suiza como centro de negocios", afirmó.