Miles de personas en una veintena de ciudades de Portugal salieron a la calle, convocados por la CGTP, el mayor sindicato del país, para pedir un cambio de rumbo a las políticas de recortes del primer ministro Pedro Passos Coelho.
Bajo el lema "Contra el empobrecimiento y la explotación", la Confederación General de Trabajadores Portugueses (CGTP, de orientación comunista) trasladó a la calle las demandas del sindicato en veinticuatro ciudades del país.
La central sindical pidió al Ejecutivo poner freno a los ajustes y evaluar la situación del país después de más de un año y medio en el poder, y en particular echar marcha atrás al plan de una reforma del Estado de 4.000 millones de euros en recortes.