El economista y premio Nobel de Economía, Paul Krugman, lo tiene claro. En un comentario escrito en la página web del New York Times deja claro que "el presidente Obama debería estar dispuesto a acuñar una moneda de platino por valor de un billón de dólares" si los republicanos tratan de forzar un impago de Estados Unidos al no elevar su techo de deuda.
Krugman califica de "extraña y destructiva" la capacidad del Congreso de EEUU para tener la última palabra en lo que al techo de deuda se refiere. El próximo bloqueo que los republicanos pueden plantear a Obama de cara a elevar la capacidad de endeudamiento del país impedirán a este llevar a cabo sus deberes legales y "provocará una situación de consecuencias catastróficas".
El premio Nobel denuncia que los republicanos están amenazando abiertamente al Gobierno con una catástrofe, al mismo tiempo que chantajean al presidente para implementar políticas que no logran pasar a través de los procesos normales de la Constitución.
Es por ello que Krugman es partidario de echar mano del vacío legal que permite al Tesoro acuñar monedas de platino por el valor deseado, en este caso un billón de dólares. Al acuñar la moneda por un billón de dólares y depositarla posteriormente en la Fed, el Tesoro podría adquirir suficiente dinero en efectivo para eludir el límite de deuda sin hacer daño económico alguno.
Para el economista, la realidad política de EEUU, "y en particular la mezcla de crueldad y locura que caracteriza republicanos de la Cámara", es más ridículo que solventar la situación con la emisión de una moneda de platino.
"Si la enmienda 14, que declararía que el techo de la deuda es inconstitucional, no es viable, Obama debería optar por acuñar la moneda", reitera Krugman quien bromea con la posibilidad de imprimir el rostro de John Boehner, el speaker republicano de la Cámara de Representantes, porque sin él y sus colegas, "este hecho no sería necesario".
