
El Banco de Japón (BOJ) ha decidido hoy ampliar su programa de compra de activos en 11 billones de yenes (106.590 millones de euros) hasta los 91 billones de yenes (881.800 millones de euros) para inyectar liquidez al sistema.
El BOJ tomó esta decisión en una reunión de un día de su junta de política monetaria, en la que también mantuvo los tipos de interés en el bajísimo nivel de entre 0 y 0,1 % que aplica desde octubre de 2010.
Peores expectativas
El emisor nipón también revisó a la baja su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) de Japón para este año fiscal, que termina en marzo de 2013, y lo situó en el 1,5%, frente al 2,2% que pronosticó en julio.
Además de aprobar nuevas medidas de estímulo, el BOJ decidió por unanimidad establecer un marco de referencia para impulsar los préstamos a largo plazo a bajo interés para las instituciones financieras con el fin de ayudar a "aumentar la demanda de crédito proactiva".
En su informe, la entidad alerta de que las economías extranjeras han "entrado más profundamente en una fase de desaceleración", lo que ha llevado a que las exportaciones y la producción industrial niponas "hayan disminuido y hayan comenzado a afectar a la demanda doméstica" que se había mantenido firme hasta este momento.
También indició en que la economía japonesa se ha debilitado y se mantiene "un alto grado de incertidumbre", que se refiere tanto a la crisis de deuda en Europa como a la recuperación de la economía estadounidense. Además, destacó el impacto de la tensión entre Japón y China, cuya disputa territorial ha tenido alcances económicos, al tiempo que llamó a seguir de cerca los acontecimientos en los mercados.
Para el emisor nipón, la economía de Japón afronta el "desafío crítico" de superar la deflación tan pronto como sea posible y retomar la senda del crecimiento sostenido a través de la estabilidad de precios. En este sentido, se comprometió a mantener una "potente" flexibilización monetaria, al tiempo que instó al Gobierno japonés a promocionar medidas para fortalecer el crecimiento del país con medidas contra la deflación y políticas macroeconómicas apropiadas.
Por otra parte, en un comunicado conjunto, el BOJ y el Gobierno reiteraron su compromiso para "trabajar unidos y realizar sus mayores esfuerzos" para lograr sus objetivos.
La última vez que el BOJ amplió su programa de compra de activos fue el mes pasado, cuando lo incrementó en 10 billones de yenes (96.901 millones de euros).