
Un presupuesto central que contribuya a reducir los riesgos de contagio de las crisis y ayude, entre otros, a financiar las ayudas al desempleo.
Los distintos gobiernos de la Eurozona han iniciado ya las negociaciones para la creación de un presupuesto común, que contaría con el apoyo -con condiciones- de Alemania, según funcionarios europeos que cita The Wall Street Journal.
Las discusiones se enmarcan dentro del debate sobre la unión fiscal que persigue la Eurozona, después de que la crisis económica haya mostrado fallos en la configuración de la moneda común. Hasta ahora, gran parte del debate sobre una unión fiscal se ha centrado en las perspectivas para una emisión conjunta de deuda en la zona euro, los llamados eurobonos, pero esta idea ha sido bloqueada en reiteradas ocasiones por Alemania.
Es en parte por culpa de esta resistencia que el debate se ha trasladado ahora a la creción de un presupuesto central. Este podría ser financiado con transferencias por parte de cada país a Bruselas, por ejemplo de parte de ciertos impuestos, tales como el de Sociedades o el IVA.
Esta idea se incluyó en un documento sobre la revisión de la Eurozona elaborado por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, que constituyó la base de las conversaciones bilaterales entre el Consejo Europeo y los Estados miembros la semana pasada en Bruselas.
Según las fuentes que cita el WSJ, funcionarios alemanes se mostraron a favor de crear un "presupuesto limitado" en la Eurozona durante esas conversaciones. Este enfoque, explican, sería más atractivo para la canciller, Angela Merkel, que cualquier forma de mutualización de la deuda.
Ayudas al desempleo
Eso sí, Berlín quiere usar el presupuesto común para financiar reformas económicas destinadas a mejorar la competitividad de algunos de los Estados miembros más débiles del bloque, pero a cambio del cumplimiento de objetivos estrictos. Algo similar a lo que se ha impuesto hasta el momento, ya que el apoyo financiero a un país a través del fondo de rescate siempre ha estado supeditado a las reformas económicas.
El presupuesto de la zona euro se complementaría con controles más estrictos sobre el gasto nacional, así como con una unión bancaria, en la que las entidades financieras de la Eurozona estarían supervisadas por el Banco Central Europeo.
De su parte, el ministro de Economía de Francia, Pierre Moscovici, defiende que con estos recursos la Eurozona pueda financiar un fondo de desempleo conjunto.
La financiación de al menos una parte del seguro de desempleo a corto plazo podría ayudar a aliviar la presión sobre los presupuestos nacionales en un momento en que la tasa de paro de muchos países está disparada ante una recesión económica que afecta de diferente modo a unos países que a otros. El fondo propuesto ayudaría sólo a aquellos que han estado en paro durante un periodo de tiempo relativamente corto no a los desempleados de larga duración, para evitar transferencias permanentes, según señalan las mismas fuentes.
Los funcionarios que cita el WSJ señalan que las conversaciones de la semana pasada, en la que participaron diplomáticos en Bruselas y funcionarios de los ministerios nacionales de finanzas, eran preliminares y que varios Estados de la Eurozona, entre ellos Holanda y Austria, se opusieron a la idea de cualquier tipo de presupuesto centralizado. Eso sí, por el momento no se ha entrado en detalles sobre el tamaño del presupuesto o incluso si podría ser implementado con los tratados actuales de la UE.