
El New York Times y su hermano internacional, el International Herald Tribune, publican un análisis titulado "El primer ministro de España camina sobre un campo de minas político", donde comenta los distintos restos que enfrenta el presidente de nuestro país tras su entrevista televisada.
"No debemos esperar que Mariano Rajoy, el presidente del Gobierno español, salte sin mirar", comienza el análisis al mismo tiempo que indica que el presidente del Gobierno ha sido hasta ahora "prudente" sobre la necesidad española de acogerse a un plan de rescate completo por parte de la troika.
Al fin y al cabo, según señala el rotativo, Rajoy tiene razones financiera pero sobre todo políticas, para proceder con precaución.
En primer lugar, el New York Times explica que la compra "ilimitada" de bonos por parte del Banco Central Europeo, tiene truco ya que se limitará a comprar bonos con madurez de hasta tres años o menos. "El problema de España es que las dos terceras partes de sus bonos de deuda cuenta con una madurez más a largo plazo. En otras palabras, lo "ilimitado" del plan de Draghi se limita a sólo una porción relativamente pequeña del tipo de deuda que Madrid ha expedido", señala.
Pero el verdadero problema de Rajoy es político. No sólo por las elecciones regionales de Galicia y el País Vasco, sino también por las rencillas que surgen dentro del propio Partido Popular. El análisis pone de manifiesto el tira y afloja de José Antonio Monago, presidente de la Junta de Extremadura, y el Gobierno central.
Sacrificio
Mark Cliffe, economista jefe de ING Bank, asegura que "el temor de los españoles es convertirse en otra Grecia - es decir, tener que cortarse el brazo derecho para recibir una transfusión de sangre". "Pero no se trata de economía, se trata de la política", añader. Los españoles "tienen que demostrar que están haciendo un sacrificio material."
Eso sí, el NYT deja claro que ese sacrificio económico que Rajoy puede esperar es limitado ya que los votantes no están dispuestos a aceptar condiciones aún más difíciles. Él ha hecho varias promesas recientes de tomar cualquier decisión de rescate "en el interés de los ciudadanos españoles".
Cliffe reconoce que "ninguna de las propuestas de Rajoy es atractiva". "A medida que la austeridad acabe por imponerse, el crecimiento va a decepcionar y el desempleo seguirá subiendo", dijo. "Muy pocos gobiernos en Europa han sido capaces de sobrevivir a esto", afirmaba.