Valencia, 21 ago (EFE).- Decenas de trabajadores de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) han empezado a concentrarse y protestar frente a la sede del consejo de administración del ente público, que se encuentra custodiada por la policía, y donde hoy se somete a votación un ERE que supondrá el despido de 1.198 empleados.
Desde una hora antes del inicio de la reunión del consejo, prevista para las 21.15 horas, al menos cinco furgones y una decena de agentes de la Policía Nacional se han ubicado en las inmediaciones de la sede del consejo de administración de RTVV, en la avenida Marques del Túria 49, impidiendo la circulación de los viandantes por la acera frente al edificio.
Únicamente a los periodistas, previa acreditación, se les ha permitido el acceso hasta la puerta que da acceso al edificio.
Además, en las calles adyacentes, se han concentrado siete vehículos de la Policía Local y cuatro de la Policía Autonómica, así como numerosos agentes de ambos cuerpos.
La mayor parte de los miembros del consejo de administración, integrado por once miembros, seis designados por el PP y cinco por el resto de grupos con representación en Les Corts (PSPV, Compromís y EU), permanecen reunidos en la sede desde horas antes del inicio del pleno.
Algunos incluso se han aprovisionado de comida ante la posibilidad de que la reunión se prolongue durante al menos tres horas -el inicio está previsto a las 21.15 horas en primera convocatoria y a las 0.01 horas en segunda-, según han explicado a Efe los consejeros socialistas.
Los trabajadores que se han concentrado junto al vallado instalado por la policía (unos veinte metros alrededor de la puerta de acceso al edificio en el que se ubica el consejo de administración) han exhibido una pancarta con el lema "Los trabajadores no somos los culpables" y han hecho sonar bocinas, alarmas y pitos.
El pasado 18 de julio, los representantes del PP en el consejo de administración de RTVV tuvieron que ser escoltados por efectivos de la Policía Autonómica para abandonar el edificio, tras aprobar la propuesta de reestructuración de la plantilla a través de un ERE.
La aprobación de esta propuesta se produjo con los seis votos a favor de los representantes del PP y los cinco en contra del resto de partidos de la oposición (PSPV, Compromís y EU).
Tras más de cuatro horas de reunión, al menos cuatro de los seis consejeros populares abandonaron el edificio por una puerta trasera para subir a un coche policial ante el asedio, insultos y lanzamiento de huevos y botellas de plástico por parte de los trabajadores del ente público, que protestaban en la calle por el citado ERE.
