La Generalitat se plantea convocar un referéndum sobre el pacto fiscal si fracasa la negociación con el Gobierno
La presión de los nacionalistas catalanes para lograr un sí del Gobierno a un nuevo modelo de financiación para Cataluña no da tregua. La Generalitat se ve con fuerza para decidir de forma unilateral crear una Hacienda propia si las negociaciones no llegan a buen puerto, según expresó ayer su consejero de Interior, Felip Puig. Su planteamiento sería que recaudara todos los impuestos sin colaborar con la Agencia Tributaria estatal.
Para el consejero, el Gobierno "mantiene una situación de clara injusticia, de no cumplir con sus compromisos, de no pagar el dinero que por ley está obligado a pagar a la Administración de la Generalitat".
El visto bueno del Parlamento catalán al nuevo modelo de financiación, aprobado a finales de julio, supone un antes y un después en las relaciones de Cataluña con el Ejecutivo. "Exprimiendo al máximo la interpretación de la ley, tendremos que poner en marcha algún mecanismo para que se den cuenta de que esta vez no se trata de mejorar un poco el modelo sino de cambiar el orden de las cosas y si están dispuestos a hacerlo pactadamente, lo haremos pactadamente, y si no, el pueblo de Cataluña tendrá que reflexionar sobre qué camino emprende", resaltó en declaraciones a la emisora Rac 1.
La prioridad del Gobierno de Artur Mas es conseguir una gran mayoría social que apoye el nuevo modelo y "paralelamente construir una Administración propia, para que cuando lleguemos a este punto podamos ponerla en marcha y tener relaciones internacionales. Nos vamos acercando a momentos de gran trascendencia".
Sobre la posibilidad de convocar un referéndum para aprobar el nuevo modelo, Puig aseguró que no lo descarta. "Un no acuerdo en torno al pacto fiscal es evidente que puede pasar por la vía de una consulta o referéndum", amenazó.
Apoyo de las Cámaras
El Consejo de Cámaras de Cataluña, el organismo que agrupa a las cámaras de comercio de la comunidad autónoma, ofreció ayer su "pleno apoyo" al Gobierno catalán ante su reclamación de un nuevo modelo de financiación.
El presidente de la Cámara de Comercio Catalana, Miquel Valls, cree que es un acuerdo "indispensable" para que Cataluña resuelva sus dificultades financieras y, por tanto, "podamos salir de la crisis e iniciar la recuperación económica". Valls instó además al empresariado catalán a que respalde la nueva financiación y dé "una respuesta conjunta al agravio histórico" que representa el déficit fiscal para Cataluña.
Valls cree también que el actual contexto de crisis económica no puede ser excusa para el Gobierno central ante las reivindicaciones de Cataluña en materia de financiación.
Por su parte, el portavoz adjunto del grupo popular en el Parlament, Santi Rodríguez, criticó que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, esté incitando "a la crispación" al mantener su demanda de un pacto fiscal. El dirigente popular adelantó que el mes de septiembre se plantearán seguir ofreciendo apoyo al Gobierno catalán si éste "adopta un funcionamiento distinto al que ha tenido hasta ahora, que ha sido de responsabilidad; pero que ahora se encamina hacia la irresponsabilidad".