
España y Francia han emitido un comunicado conjunto tras la reunión que han mantenido Luis de Guindos, ministro de Economía y Competitividad, y su homólogo francés, Pierre Moscovici.
"Ambos coincidimos en que la asistencia financiera a España para la recapitalización de sus instituciones financieras es un paso clave para restaurar la confianza en el sistema financiero español y para reforzar la estabilidad financiera de la zona euro", aseguran en el comunicado.
"La recapitalización de las instituciones financieras, acompañada de un plan de reestructuración en profundidad de las instituciones concernidas, permitirán restaurar la confianza y contribuir al buen funcionamiento de los canales de financiación de la economía" añade la nota.
En línea con lo declarado ayer tras la reunión con el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, ambos consideran "que el nivel actual de los tipos de interés que prevalecen en los mercados de deuda soberana no refleja los fundamentales de la economía española, su potencial de crecimiento y la sostenibilidad de su deuda pública".
En este sentido, creen que "la pronta implementación de este programa de asistencia financiera es esencial para restaurar la confianza y las condiciones para el crecimiento. Confiamos plenamente en que ello será una contribución esencial a que España vuelva al camino del crecimiento sostenible".
"También hemos reafirmado nuestro compromiso de implementar plena y rápidamente las decisiones tomadas en el Consejo Europeo del 28 y 29 de junio", continúa el comunicado, prácticamente idéntico al emitido ayer.
Asimismo, piden que "antes de fin de año" se cree "un mecanismo integral de supervisión para los bancos de la zona euro que implique al BCE", y "esperamos las propuestas de la Comisión de aquí a septiembre y nos comprometemos a una negociación rápida".
"Este mecanismo de supervisión abrirá la vía a recapitalizaciones directas con condicionalidad apropiada", añaden sobre la posibilidad de que el fondo de rescate inyecte dinero directamente a los bancos, sin pasar por el Estado.
"Como consecuencia del Consejo Europeo del 28 y 29 de junio, vamos a trabajar también en el diseño de una hoja de ruta para una genuina unión económica y monetaria, que incluya propuestas ambiciosas para crear condiciones de solidaridad al mismo tiempo que de integración", añade.