
Hacienda brinda más liquidez a las autonomías a cambio de que cumplan con su meta de déficit. Montoro recalca que trabaja con la Generalitat en el "chequeo" de las cuentas desde la "lealtad".
Las cifras que miden el esfuerzo del Gobierno en brindar liquidez a las autonomías desmontan el victimismo del presidente de la Generalitat, Artur Mas, quien, además de culpar sistemáticamente a Madrid de todos los ajustes que acomete Cataluña, trata de escudarse en el resto de comunidades autónomas llamándolas a la rebelión contra los nuevos tijeretazos.
Sin embargo, el equipo económico de Mas omite en sus quejas la realidad de que, pese a la difícil coyuntura, el Estado ha proporcionado liquidez adicional a las comunidades autónomas utilizando todos los recursos que brinda el sistema de financiación, de modo que Cataluña se ha visto beneficiada con 4.000 millones adicionales correspondientes a la liquidación de 2010.
Fuentes de Hacienda destacan que precisamente en un momento de crisis, Cataluña está recibiendo más dinero del sistema de financiación, algo que legitima al Gobierno central, tanto en el caso catalán como en el resto, a no cejar en la exigencia de que todas las administraciones cumplan, sí o sí, los objetivos presupuestarios que se les han marcado, de un desequilibrio máximo del 1,5 por ciento.
Pese al oxígeno financiero extra que recibe Cataluña, no cesa de llorar y reaccionar a los recortes, culpando al Gobierno central de los ajustes que deberá abordar el Govern. Incluso amenaza con judicializar los tijeretazos. Así, el portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, avanzaba esta semana que el Ejecutivo de Artur Mas recurrirá ante el Tribunal Constitucional los aspectos de los últimos recortes anunciados por el Gobierno que aprecien susceptibles de vulnerar competencias de la Generalitat. Explicó que pedirán dictamen al Consejo de Garantías Estatutarias y que, en función de la respuesta, recurrirán al TC varias de las medidas: "Si las piezas encajan, que pensamos que sí, presentaremos recurso".
Negociaciones bilaterales
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, indicaba ayer tras el Consejo de Ministros que -en el marco de las negociaciones bilaterales que el Gobierno mantiene con las comunidades autónomas en orden a garantizar que todas reconducen sus desequilibrios al 1,5 por ciento este año- trabaja en el "chequeo" con Cataluña desde la "lealtad institucional", como con todas las CCAA, en clara contraposición a las declaraciones recientes de Mas, cuando llamó a todas las regiones a "plantarse" ante ante la "deslealtad total" mostrada, a su juicio, por el Gobierno de Mariano Rajoy por no rebajarles los objetivos. Pero según Montoro la lealtad "tiene que existir entre las administraciones", si bien añadió ayer: "A partir de ahí, yo oigo otras opiniones".
Una de las ocho amonestadas
Cataluña ha reconocido ser una de las ocho autonomías que salieron señaladas del último Consejo de Política Fiscal y Financiera, al haber recibido una llamada de atención por parte de Hacienda ante un posible incumplimiento del objetivo de déficit.
Firmeza antidéficit
Las autonomías en general y Cataluña en particular aducen como causa de su indignación el hecho de que el Gobierno central no haya relajado la meta de déficit autonómica, pese a que Bruselas sí ha dado más margen a España. Es decir, cuando el objetivo de déficit total era de un 5,3 por ciento a cierre de 2012, a las CCAA se les marcó una meta del 1,5 por ciento. Y ahora que a España se le amplía el margen hasta el 6,3 por ciento, a las autonomías no se les amplía la meta.
Pero Hacienda tiene muy claras sus razones. En el primer caso, la Administración central asumió en solitario el grueso del ajuste al 5,3 por ciento. Por eso ahora es el Estado quien se anota la ampliación al 6,3 por ciento. La cuenta de la liquidez extraordinaria brindada a las autonomías del Gobierno es ésta: una línea ICO de 15.000 millones para que puedan financiar su deuda, el retraso de 10 años en la devolución de lo cobrado de más por las sobrestimaciones del Gobierno socialista (3.156 millones) y el adelanto de la liquidación del sistema de financiación de 2010 (5.176 millones). Además, ha apuntalado un plan de proveedores que ayuda en 16.980 millones y ha creado un mecanismo de liquidez en forma de fondo para que afronten vencimientos por 18.000 millones.
Esfuerzo extraordinario
Según consta en el texto de una comparecencia en el Congreso de los Diputados del secretario general de Coordinación Autonómica y Local, Enrique Ossorio, la Administración Central ha hecho un esfuerzo extra para que las Administraciones Periféricas reciban más oxígeno que en 2011, pese a ser este año el del macroajuste fiscal. Las transferencias y subvenciones corrientes y de capital, el sistema de financiación y los fondos de compensación territorial para CCAA y ayuntamientos crecen este año un 8,9 por ciento. Destaca también el texto que el Gobierno ha usado al cien por cien los recursos a su alcance para evitar que caiga la financiación territorial, como sería de esperar dada la coyuntura. Así, el esfuerzo adicional acometido por el Ejecutivo eleva en un 1,35 por ciento el oxígeno financiero a las administraciones territoriales.
En concreto, se presupuestó una inyección adicional de 16.602 millones para las autonomías.