Desde su despacho en la sede del Fondo Monetario Internacional en Washington, Jörg Decressin, jefe de división el Departamento Europeo, puso en perspectiva para este periódico la multitud de datos publicados la semana pasada sobre nuestro país e hizo balance sobre los últimos acontecimientos vividos en la zona euro.
Según las previsiones del FMI, España no cumplirá sus objetivos fiscales hasta 2018, ¿qué repercusiones tendrá imponer metas poco realistas a corto y medio plazo?
Creemos que las metas fiscales tienen que ser discutidas primero y sobre todo en el seno del Gobierno de España y posteriormente con sus socios europeos para poder así ofrecer un mensaje coherente tanto al público como a los mercados financieros. Esto es muy importante. Desde nuestro punto de vista, el ajuste fiscal en España es una maratón y no una carrera corta por lo que la mejor manera de recuperar la confianza es tener buenas medidas sobre la mesa que se comprenden bien y que estén basadas en proyecciones de crecimiento realistas que comulguen con las metas fiscales correspondientes. Posteriormente, hay que cumplir esos objetivos, porque las sorpresas suelen asustar a los mercados. En este sentido los objetivos fiscales fijados por el Gobierno español para el 2012 son en general adecuados. A medio plazo tendrán que identificar nuevas medidas para continuar con el ajuste fiscal.
Ya hemos visto tensiones entre el Gobierno y la UE debido a estos hechos. ¿Benefician o empeoran estos eventos la situación actual?
Es por el propio bien de España reducir su abultado déficit fiscal y es por el propio bien de la UE que esto se haga de una forma que no provoque sorpresas en los mercados más adelante. De esta forma, las tensiones disminuirán más rápido y esto permitiría el regreso de un crecimiento más fuerte. Por lo tanto, el énfasis tiene que estar en medidas fuertes, en metas realistas y en buenas relaciones con los socios de la zona del euro. Hasta ahora se han puesto de acuerdo para apoyarse mutuamente con el cortafuegos para compartir los riesgos. Ahora deben también compartir la responsabilidad sobre sus políticas fiscales. Si esto ocurre, las tensiones tenderán a disminuir más rápido y habrá menos sorpresas y desacuerdos que permitan un crecimiento más fuerte volver cuanto antes.
Pero en España, algunos informes señalan que el precio de la vivienda seguirá cayendo, incluso un 35%...
Es muy difícil estimar con algún grado de confianza hasta donde llegará el ajuste del sector inmobiliario español. Lo que es importante, mientras tanto, es que los bancos acumulen reservas de liquidez. En este sentido ya hemos vemos visto planes para reformar el sector bancario, ahora la clave está en la implementación de los planes para reformar el sector bancario.
En sus perspectivas de crecimiento mundial, el FMI sugiere que España podría haber acomodado mejor el impacto de sus medidas en el crecimiento ¿qué significa esto?
Básicamente significa que, a nuestro juicio, si se hubieran compensado las pérdidas de ingresos fiscales, provocadas por un menor crecimiento, con un mayor ajuste, España no habría sufrido una reacción adversa de los mercados y se hubiera proporcionado apoyo a la actividad económica. Sin embargo, todavía hay una necesidad para identificar las medidas que se aplicarán en el futuro para reducir el déficit a medio plazo.
¿Por qué sería efectiva la toma directa de activos bancarios europeos por parte de los mecanismos disponibles?
La recapitalización de los bancos se ha convertido en una preocupación para los países que ya están viendo como sus bonos soberanos sufren la tensión de los mercados. Si estos países tratasen de recapitalizar sus bancos, su deuda pública aumentaría y por lo tanto correría el riesgo de ser sancionado de nuevo por los mercados, con mayores primas de riesgo, que empeorarían el aún más el contexto económico . La idea detrás de nuestra propuesta tiene como objetivo romper el vínculo entre la deuda soberana y el sector bancario. En estas circunstancias, apostamos por ofrecer la disponibilidad de fondos que puedan tomar participaciones de capital directas en los bancos de varios países. A día de hoy, este tipo de operación no está disponible Europa. Tampoco es posible a través de Mecanismo de Estabilidad Europea o el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera comprar participaciones directas en los bancos. Es decir, no se pueden obtener estas participaciones sin tener que realizar préstamos a través de los soberanos.
¿Es factible una posible ruptura de la zona del euro o la salida de alguno de sus miembros?
La salida de un país miembro de la zona del euro es un riesgo de cola en nuestras Perspectivas Económicas Mundiales. Esto significa que es un escenario con una probabilidad muy pequeña. En nuestra opinión, los costes de abandono serían muy altos. Las consecuencias económicas y políticas serían muy graves. Teniendo en cuenta esto y también que existe un apoyo muy fuerte, incluso por los países que implementan ajustes, para permanecer en la UE somos optimistas de que la zona permanecerá unida. Estamos bastante seguros de eso. Existen desacuerdos sobre las reformas, pero no hay un desacuerdo sobre la permanencia en la UE.