París, 4 jul (EFECOM).- El Gobierno andorrano quiere establecer una convención fiscal con los países vecinos dentro de su programa de reformas para abrirse a la inversión extranjera, aunque no contempla informar al fisco de esos países sobre los bienes de los residentes extranjeros en Andorra.
El ministro andorrano de Economía, Joel Font, explicó hoy a la prensa en París que una de las cuestiones para negociar en la convención es "la transmisión de información" sobre las transferencias de capitales.
La nueva legislación que prepara el Ejecutivo establecerá controles sobre las transferencias, pero no se puede todavía entrar en detalle en el contenido de las convenciones sobre la doble imposición fiscal que pretenden conseguir con países como España y Francia.
La embajadora andorrana en Francia, Imma Tor, puntualizó que "no está a la orden del día" una reforma para dar cuenta a los servicios de Hacienda de los países con los que se firme esa convención la transmisión de los bienes de sus nacionales en Andorra.
Los responsables gubernamentales andorranos subrayaron que sí transmiten informaciones sobre los haberes de residentes en algunos casos en los que interviene la justicia penal y que colaboran en la lucha contra el blanqueo de dinero, pero recordaron que incluso países de la Unión Europea (UE) como Austria o Luxemburgo mantienen el secreto bancario.
El Principado pirenaico prepara un dispositivo de reformas para "reforzar la seguridad jurídica" de los inversores, señaló Font, lo que pasa entre otras cosas por leyes previstas para el año que viene para fijar un impuesto de sociedades -más bajo que en los países vecinos- una normativa sobre auditorías de cuentas y otra sobre garantías a los derechos de propiedad intelectual.
Luego vendría la negociación de la convención fiscal. El Gobierno espera que todo este programa contribuya al objetivo de duplicar el Producto Interior Bruto (PIB) del país en un plazo de 15 años. EFECOM
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