El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ha admitido que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) son "duros, desagradables, incómodos y que no gustan a nadie". Pero, como ha dejado claro, "hemos tenido que hacerlos porque la alternativa era infinitamente peor".
Ante esto, ha defendido que el Ejecutivo "sabe lo que tiene que hacer" y ha advertido de que si el PSOE cuando gobernaba "hubiera cumplido sus compromisos", no habrían sido así de duros.
Asimismo, ha acusado a los socialistas de querer llevar a España a una situación "imposible", en referencia a las críticas a los Presupuestos y a reformas que se están impulsando, como el cambio de la legislación laboral.
"Me sorprende muchísimo", ha señalado al respecto, "que aquellos que con sus políticas nos han traído hasta aquí, no hayan comprendido todavía la situación en la que estamos y pretendan que sigamos haciendo lo que ellos hicieron para colocarnos ya en la situación imposible".
El líder 'popular' ha presidido este miércoles en Antequera (Málaga) el Comité Ejecutivo del PP en Andalucía, el primero tras las elecciones del pasado 25 de marzo, en las que los 'populares' se quedaron a cinco escaños de la mayoría absoluta en el Parlamento andaluz. Tras mostrar su apoyo al líder de los populares andaluces, Javier Arenas, el presidente se ha referido a que España está en una situación de "extrema dificultad".
Rajoy ha destacado la importancia de reducir el déficit público, para lo que son necesarias reformas. Al respecto, ha destacado que el Gobierno que preside ha sido "justo y equitativo" a la hora de acometerlas.
Del mismo modo, ha señalado que tras el ajuste planteado por la Administración central, ahora son las comunidades autónomas las que "tienen que cumplir" y reducir su déficit, "gobierne quien gobierne".
"Los presupuestos son duros pero imprescindibles"
