
Barcelona, 27 mar (EFE).- El acuerdo de fusión de CaixaBank y Banca Cívica ha sido recibido hoy en la Bolsa con una venta masiva de acciones de ambas entidades, que han cerrado la jornada con pérdidas, en especial la que integran las cajas de Navarra, Canarias, Burgos y Cajasol, que se ha desplomado un 16,4%.
El acuerdo de integración ha generado una gran actividad bursátil, hasta el punto de que el volumen de contratación de Banca Cívica ha aumentado hasta los 2 millones de títulos, frente a los 600.000 de media del último trimestre.
CAIXABANK (CABK.MC)han movido igualmente 13,8 millones de acciones, cuando su media diaria ronda los 3,5 millones.
En concreto, la cotización de Banca Cívica ha caído hasta 1,855 euros, lo que sitúa la acciones de la entidad por debajo incluso de la ecuación de canje que aplicará CaixaBank para su absorción, de 1,97 euros.
La caída de Banca Cívica es una situación atípica que podría corregirse en los próximos días, aunque ha abaratado momentáneamente la factura que tendrá que pagar la entidad catalana por absorberla, pues a precios de hoy debería emitir acciones por importe de 935 millones, algo por debajo de los 977 millones de ayer.
La cotización de CaixaBank, por su parte, ha retrocedido un 2,43%, hasta 3,01 euros.
Con la fusión aprobada ayer, Caixabank se convertirá en la mayor entidad española por volumen de activos (342.000 millones), depósitos (179.000 millones) y créditos (231.000 millones).
El consejero delegado de CaixaBank, Juan María Nin, ha informado hoy de esta operación en un encuentro con analistas, en el que ha asegurado que tras la compra de Banca Cívica no hay "apetito" para abordar otra fusión.
"No tenemos ninguna otra operación sobre la mesa", ha afirmado Nin, que ha dejado claro que la intención de CaixaBank es seguir creciendo fundamentalmente de manera orgánica, pese a que algunos medios informan de que la entidad catalana podría estar ahora interesada en pujar por Novagalicia.
De hecho, la fusión por absorción de Banca Cívica no supone un impedimento legal para que La Caixa aborde otras fusiones, dado que en el acuerdo firmado ayer se reserva la posibilidad de estudiar otras operaciones e incluso acometerlas.
Tras la conferencia de analistas, Nin ha asistido a un almuerzo organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección junto al ministro de Economía, Luis de Guindos, que ha tildado de "positiva" la adquisición de Banca Cívica por parte de CaixaBank.
En una entrevista radiofónica, ha considerado la operación "muy interesante" y ha augurado que será "beneficiosa para todas las partes".
También el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, ha aplaudido hoy que CaixaBank vaya a absorber Banca Cívica sin recurrir a ayudas públicas y ha felicitado a ambas entidades por la operación, aunque ha incidido en que el Banco Popular hizo exactamente lo mismo, "mejor y antes".
Esta operación de fusión, si embargo, ha despertado críticas y recelos por parte de algunos partidos y sindicatos, como UGT y ELA, que han criticado en sendos comunicados el proceso que ha desembocado en la absorción de Banca Cívica por parte de Caixabank y han lamentado que esta operación haya supuesto la "desaparición" de Caja Navarra, que forma parte del grupo de cajas adquirido por la entidad catalana.
Bildu, por su parte, ha presentado una moción encaminada a que el Parlamento Foral repruebe la actuación de los responsables políticos en relación con Caja Navarra, "por el abandono absoluto de sus principios fundacionales y la pérdida de casi la totalidad de su valor".
El alcalde de Burgos, Javier Lacalle (PP), ha pedido una reflexión sobre el proceso de fusiones de las cajas de Castilla y León a partir de la situación de Caja Burgos, que, como integrante de Cívica, quedará integrada en CaixaBank con un 0,7% de sus acciones, mientras que el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, espera que tras la fusión el grupo La Caixa mantenga la sensibilidad hacia los problemas y necesidades de Canarias.