Los principales sindicatos de Bélgica intentarán paralizar el país mañana con una huelga general que han convocado para protestar contra las medidas de austeridad anunciadas por el Gobierno, en el día en que los líderes europeos celebran una cumbre extraordinaria en Bruselas.
El principal motivo de queja por parte de los sindicatos son los planes del Gobierno del socialista Elio Di Rupo de recortar el gasto público para cumplir con los objetivos de déficit del país, a través del retraso de la edad para acceder a algunas pensiones adelantadas o la reducción de las prestaciones de desempleo.
La huelga no irá acompañada de una gran manifestación en Bruselas, sino que los presidentes y secretarios generales de los sindicatos cristiano, socialista y liberal se darán cita en una "acción simbólica" frente a la sede del Consejo de la UE, unas horas antes de que lleguen los jefes de estado y de gobierno de los Veintisiete, según informa la agencia de noticias Belga.