La novena victoria del joven senador de Illinois erosiona cada vez más el ego de Hillary Clinton, que sigue centrada en dar la campanada el próximo cuatro de marzo en Ohio y Texas, donde la comunidad latina tendrá mucho que decir. Sin embargo, Barack Obama demostró una vez más que su verborrea y sus ganas de cambio están calando hondo entre los estadounidenses.
Este resultado es un mal augurio para la ex primera dama, a dos semanas de las primarias en Ohio y Texas, donde están en juego un total de 334 delegados. El caso es que Ohio tiene ciertas similitudes con Wisconsin, ya que ambos son estados industriales donde la crisis económica he hecho mella.
Obama intentó hasta la saciedad ganarse el favor de los sindicatos en Wisconsin donde la semana pasada ofreció un meeting electoral desde una de las fábricas de General Motors. Algo que ha parecido favorecerle en las urnas.
¿Plagio de estrategia?
Sin embargo, esta estrategia ha sido tildada de plagio por Clinton que no dudó en reconocer que “si tu campaña está basada en palabras, al menos deben ser tus propias palabras”. Cabe recordar que el pasado lunes, partidarios de la senadora criticaron a Obama por usar frases de alguien más, en un discurso, sin reconocer su fuente. Obama respondió a las acusaciones reconociendo que debía haber dado crédito a su amigo, el gobernador de Massachussets Deval Patrick, quien le había dado permiso para usar las frases en cuestión.
Por su parte, el senador por Arizona, John McCain, se adjudicó ayer la victoria en las primarias republicanas en el estado de Wisconsin. El ex combatiente de Vietnam está a un paso de conseguir el número de delegados necesarios para ganar la nominación, pero aún se enfrenta la oposición del ex Gobernador de Arkansas Mike Huckabee, empeñado hasta la saciedad en seguir adelante con su campaña pese a que a estas alturas es virtualmente imposible que remonte su resultado.
Apoyo de Bush padre
"Gracias Wisconsin, por habernos llevado al punto en el que incluso un piloto supersticioso de la marina como yo puede afirmar con confianza y humildad que será el candidato de nuestro partido" dijo McCain rodeado de multitud de seguidores en Columbus, Ohio, un estado que en dos semanas podría darle los últimos delegados que le faltan para lograr oficialmente la candidatura republicana.
Parece que el respaldo de George Bush, padre del actual mandatario, ha sido una buena guinda para un pastel que se perfila como prometedor. Cabe recordar, que el ex presidente Bush declaró el pasado lunes a la prensa que “creo que este es el momento preciso para ofrecer mi ayuda a John para que construya la coalición necesaria que conduzca a nuestros valores a ocupar la Casa Blanca el próximo otoño”.
El actual presidente estadounidense, George Bush hijo, no ha mostrado su apoyo a ninguno de los candidatos. Eso sí, ha reconocido que si McCain se alza con la victoria tras la nominación republicana, estará encantado de apoyar al senador en el resto de su campaña al Despacho Oval.