El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha acusado este lunes a la CEOE de dificultar la negociación sobre la reforma laboral "enrocándose en posiciones". Según ha explicado en declaraciones a Telecinco, aunque en la primera parte de la semana pasada los sindicatos creían haber resuelto diferencias importantes con la patronal, la negociación ha experimentado "una especie de vaivén" porque la CEOE ha vuelto a poner sobre la mesa reivindicaciones "inconvenientes".
El dirigente sindical ha dado a entender que la patronal está pidiendo "congelación salarial pura y dura", un "abaratamiento general del despido" y la descausalización del mismo, medidas que pueden provocar más paro del que España tiene y que los sindicatos no están dispuestos a aceptar porque agravarían aún más la situación de recesión económica.
El dirigente sindical no piensa por ahora en el desacuerdo, y ha pedido al Gobierno que, si tanto valora el pacto social, ayude a la consecución del mismo. Eso sí, ha dejado claro que "ser taxativo en los plazos" no ayuda al acuerdo.