Economía

Este mercado sigue siendo un auténtico desafío

En la soledad del teclado y frente a unos pocos gráficos, el chartista con experiencia y ojos para ver además de paramirar, frecuentemente se siente desnudo y tiene la tentación de acudir a otras fuentes. Si tiene muchísima experiencia sabe que esa tentación debe evitarse; pero que debe escuchar. Somos mendigos en esta tierra. Incluso los hedge funds.

El año se dirige a su cierre y rubricará uno de los ejercicios más oscuros para los caminos que sigo desde hace 17 años. Precios y correlaciones entre activosmehan dado muchas alegrías y algunos disgustos; 2011 se contará entre los segundos, aunque en términos generales hacer las cosas como es preceptivo nos hayan permitido hacerlomejor que la mayoría de índices de referencia. Ésa es al final del camino la tarea, pero uno siempre pide más.

No se trata de encontrar excusas sino de exponer hechos. El mercado vive en un período anormal desde un punto de vista técnico aunque ahora todos tengamos claro que es completamente lógico si atendemos a los problemas de la deuda europea. ¿Los problemas de Alemania? ¿Los que parece que no tuvieran también norteamericanos y británicos a tenor del comportamiento de sus principales índices?

Pero algo podría estar cambiando a tenor de la actitud que está teniendo el nuevo gobernador del BCE. Con tipos tendiendo a cero y una nueva inyección de crédito pese a todo lo que pueda decirse por ahí -es cierto que mucho va a refinanciar líneas y que los bancos pueden no comprar más deuda, pero no lo es menos que como poco no tendrán que seguir vendiéndola-, quizá ello pueda acabar justificando un euro/dólar bajista con unas bolsas alcistas. Con todo, ya salió el analista técnico que llevo dentro, si no lo veo no lo creo.

No es tiempo para tomar grandes decisiones, pero tampoco para pasar por alto algunas cosas: las bolsas no están caras, las inercias mayores son más alcistas que bajistas; y toda reversión de la tendencia empieza siendo considerada rebote. Pascal, sabiamente, ya advirtió que lo último que uno sabe es por donde empezar. Las cosas no se crean: aparecen.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky