
Artur Mas presenta hoy los presupuestos para el año 2012. Serán los segundos que elabora el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, y los segundos que, en la historia moderna de la Generalitat, serán inferiores a los del año anterior.
Sin embargo, la rebaja (que en los presupuestos de 2011 fue del 10%) será inferior, del orden del 5%, ya que Mas-Colell confía en lograr más ingresos propios y del Estado en 2012 que en 2011.
La reducción del déficit público se convierte de nuevo en el eje sobre el que la Generalitat construye las cuentas del año que viene. Frente a un déficit público previsto para este año del 2,66% (unos 5.400 millones de euros), en 2012 el desfase presupuestario no debe ser mayor del 1,3%, cifra a la que Mas-Colell se han comprometido públicamente. Para alcanzarla, la Generalitat debería ajustar sus gastos del orden de 2.800 millones, lo que sobre un presupuesto del 25.000millones, supondría un nuevo recorte del 10 por ciento.
Sin embargo, el Gobierno de CiU considera que podrá recortar ese porcentaje a la mitad, ya que confía en que Cataluña recaudará más dinero vía transferencias del Estado y, sobre todo, a través de las subidas de tasas como la del agua, transportes, universidades y el llamado ticket moderador de la sanidad que supondrá el pago de un euro por cada receta facilitada por la Sanidad Pública.
Pese al aumento de ingresos, la Generalitat estima que deberá recortar sus gastos entre 1.000 y 1.500 millones de euros. La mayor parte de este ajuste se hará a cargo de los esfuerzo salariales y fiscales de los empleados de la función pública, que corresponde con el Capitulo I. Recorte de la masa salarial
El ahorro estimado en este capítulo es de unos 625 millones, que se lograrán mediante la reducción de algunas pagas extra de los funcionarios públicos y el recorte de jornada y sueldos de los interinos contratados. Este recorte fue objeto de negociación hasta el viernes de la semana pasada, cuando los sindicatos de la función pública se levantaron de la mesa. De esta forma, la Generalitat deberá dictar los ajustes salariales de manera unilateral.
El recorte del 5% no será lineal, ya que el ejecutivo de Mas considera que los departamentos de Salut, Educació y Benestar Social ya han hecho un esfuerzo muy importante a lo largo de 2011 y no es posible volver a recortar sus presupuestos un 5 por ciento sin afectar a los servicios.