El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, cree que los sueldos de los directivos de las cajas son un "escándalo incalculable", y reconoce que creía que los gobiernos autonómicos los supervisaban.
Al mismo tiempo, ha defendido la actuación del Banco de España. Considera que "funciona razonablemente bien" y ha destacado que es una institución acreditada en el mundo.