Economía

Consecuencias de la disolución de las Cortes: seis leyes económicas se guardarán en el cajón

No se logra que el Fondo de Reserva salga a bolsa ni endurecer las penas por delitos fiscales. Foto: archivo
Debates agrios, multitud de iniciativas que han enfrentado a la Cámara, leyes polémicas, otras de gran calado y... ocho, de las que seis son económicas, que después de casi cuatro años han acabado en el olvido, encerradas entre las cuatro paredes del Congreso de los Diputados. Se disolverán las Cortes con el decreto que firmará el presidente del Gobierno y se convocan las elecciones del 9 de marzo.

Arranca un periodo de dura confrontación política para tener el máximo apoyo en el nuevo Hemiciclo. Los partidos políticos tendrán que dar cuenta de sus nuevas promesas, pero también deberán enfrentarse a las decisiones que han adoptado en los últimos cuatro años.

Numerosas leyes del Gobierno

La legislatura nos deja muchas leyes en vigor -el Gobierno impulsó 140 proyectos que han sido aprobados-, pero también otras que pasarán a la historia. En total son 11: tres que el Gobierno o bien retiró o para las que no logró respaldo suficiente, y otras ocho a las que la disolución de las Cortes ha pillado sin recibir el visto bueno definitivo de las Cámaras. De ellas, seis tienen contenido económico.

Es el caso de la norma que permite invertir en bolsa parte del Fondo de Reserva de la Seguridad Social. La falta de apoyo del PP llevó al Gobierno a dejar que el final de la legislatura acabe con ella. El Ministerio de Fomento se deja un AVE sin inaugurar, el de Barcelona, y dos asuntos del mar sin resolver: son la ley de navegación marítima y la que modificaba la regulación de los puertos españoles.

Pero, sin duda, el que se despide con más temas pendientes es el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo. Juan Fernando López Aguilar le dejó algunas tareas, pero el polémico fiscal no ha conseguido impulsarlas. Es lo que ha ocurrido con la norma que regulaba la administración del patrimonio protegido de las personas con discapacidad, una figura que permite que los familiares aporten fondos a un discapacitado obteniendo ventajas fiscales. Tampoco se ha aprobado la reforma del Código Penal que endurecía varios delitos fiscales ni otra ley que fijaba la prelación en los créditos en el caso de ejecuciones singulares.

Bermejo entierra en el Parlamento los proyectos de ley de justicia de proximidad y de reforma del recurso de casación. Su contenido no es económico, como tampoco los de las dos normas que el Ejecutivo retiró: una sobre jurisdicción voluntaria y la de cesión del Castillo de Montjuïc. El Parlamento frenó la reforma del poder judicial, cuya votación perdió el PSOE.

Proposiciones de ley

Otra tónica que ha marcado estos cuatro años es el haber contado con un Gobierno sin mayoría absoluta. Eso ha permitido que un buen número de proposiciones de ley presentadas por los grupos políticos hayan visto la luz. Sin embargo, no han sido los socios del Ejecutivo al principio de la legislatura -IU y ERC -los que más iniciativas han visto aprobadas, sino CiU.

Entre estas 27 proposiciones destacan la que ha permitido a ex alcaldes y ex concejales acceder a la prestación por desempleo o la que reformó el sistema de financiación de los partidos. Por este procedimiento se cambió también la ley del Consejo de Seguridad Nuclear; se limitaron a tres las subcontrataciones en el sector de la construcción; se elevaron una serie de pensiones, y se estableció la compatibilidad entre el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez y la pensión de viudedad.

Estatutos de autonomía

Las comunidades autónomas también tienen capacidad de propuesta y ésa ha sido la vía para que estos cuatro años hayan sido los de la revisión del modelo territorial. Seis Estatutos de Autonomía fueron modificados: los de Valencia, Cataluña, Aragón, Baleares, Castilla y León y Canarias. Pendiente para la próxima legislatura queda el de Castilla-La Mancha y rechazado por el Congreso el del País Vasco, tras el que se escondía el plan Ibarretxe.

Pero en el camino se han quedado otro centenar de propuestas. Entre las más sorprendentes está una que fue aprobada por unanimidad en el Senado en 2005. ¿Su objeto? Permitir a los autónomos incorporarse al Consejo Económico y Social. Sin embargo, las presiones recibidas por los diputados por parte de sindicatos y patronal han acabado con esta proposición escondida bajo las alfombras.

Lo que sí salió adelante

Entre las grandes leyes que sí consiguieron el apoyo mayoritario de diputados y senadores muchas tienen un marcado tinte económico. La Ley de Estabilidad Presupuestaria flexibiliza los requisitos para tener déficit; la de horarios comerciales reguló la apertura de festivos, preservando las competencias autonómicas; la ley de opas permitió a España adoptar una directiva comunitaria y acabó con las ofertas parciales, y la reforma laboral -con el apoyo de los agentes sociales- impulsó la estabilidad en el empleo mediante incentivos a los empresarios...

Además, las Cortes aprobaron 100 medidas para impulsar la productividad; la Ley del Suelo que reserva el 30 por ciento para la construcción de Viviendas de Protección Oficial o el Estatuto del Autónomo, que amplías derechos de tres millones de emprendedores...

Normas sociales

También la octava legislatura deja leyes de marcado carácter social, como la de igualdad, que promueve la presencia de un 40 por ciento de mujeres en los consejos de administración de las empresas en un plazo de ocho años, o la de dependencia, que convierte en un derecho la asistencia o prestación a quienes necesitan ayuda para las actividades básicas de la vida diaria.

Reformas fiscales

En el ámbito fiscal destacan la reforma del Impuesto de Sociedades, que rebajó el tipo en cinco puntos y suprimió deducciones; la reducción en un 6 por ciento de media del IRPF, aunque se elevó la tributación del ahorro, y la ley para la prevención del fraude fiscal.

Y la maquinaria no ha parado hasta el final... En los últimos meses las Cámaras han dado luz verde a una de las medidas más comentadas, el cheque-bebé de los 2.500 euros a quienes tengan o adopten un hijo, y la reforma de la Seguridad Social, que permitirá cobrar una pensión mayor a los que se retiren con más de 65 años.

Y cada año el Parlamento aprobó los presupuestos, que llegaron al Congreso sin su famosa 'ley de acompañamiento'. Los dos primeros años el apoyo llegó de IU-ICV y ERC... y en los dos últimos principalmente del PNV.

Ni se sacaron del cajón

Luego está el bloque de lo que pudo haber sido y no fue; reformas prometidas por el Gobierno que ni siquiera se sacaron del cajón. ¿Se acuerdan de la reforma de la Constitución? Fijaba la igualdad entre hombre y mujer en la sucesión a la Corona; citaba a las comunidades autónomas en la Carta Magna; incluía una referencia a la Constitución Europea, y modificaba el Senado. Otra vez será. La bronca PP-PSOE lo impidió, como sucedió con el nuevo sistema de financiación autonómica y con la reforma de las Haciendas Locales.

En todo caso, la octava legislatura será recordada por la instauración de la Conferencia de Presidentes y por ver al jefe del Gobierno en sesiones de control del Senado, Con ello se avanzó en la regeneración democrática aunque sigue quedando mucho por hacer. O si no que le pregunten a Manuel Marín, otro presidente del Congreso que deja la institución sin reformar el reglamento de la Cámara.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky