
¿Crisis en el sector inmobiliario? El BBVA asegura que existe mucho ruido, pero que en los próximos años el grifo del crédito seguirá abierto para los hogares y también para los promotores, aunque el ritmo de crecimiento de los préstamos no será tan alto como en el pasado, según el economista jefe de la entidad, José Luis Escrivá.
Los fondos que se prestaban a las inmobiliarias llegaron a alcanza niveles de avance "insostenibles", con tasas que rozaron el 50 por ciento el pasado año. Este ejercicio se superará el 20 por ciento y en 2008 el alza se quedará en el 10, pero ni siquiera se llegará a producir una congelación del crédito.
Un 41% menos para comprar casas
Y en cuanto a los hogares, más de lo mismo. Las entidades financieras les concederán cerca de 100.000 millones de euros en 2008 para que compren casas. No son los 170.000 millones de 2006, pero las familias seguirán contando con el apoyo de los bancos. Con ello, el saldo hipotecario experimentará un alza superior al 5 por ciento, lejos, eso sí, de los incrementos del 25 por ciento de la parte alta del ciclo. Ese avance acercará a España a los niveles de evolución de los préstamos de Estados Unidos y de la zona euro.
La razón de esta desaceleración es que se está produciendo un matrimonio entre la oferta y la demanda de pisos, tras años en los que las peticiones de nuevas casas iban a una velocidad mucho mayor que las viviendas que se sacaban al mercado.
Previsión de desaceleración
Y las consecuencias del frenazo del sector inmobiliario se notarán tanto en términos de crecimiento económico como de creación de empleo. El BBVA ha revisado a la baja su previsión de avance del PIB para 2008, del 2,8 al 2,6 por ciento. El motivo es que la inversión en vivienda caerá un 3,5 por ciento, lo que restará esas dos décimas al crecimiento español. En 2009 la aportación volverá a ser negativa, pero ya en 2010 se notará la recuperación de este sector.
Descenso de empleo
En cuanto al empleo, la entidad ratifica las previsiones realizadas por el G-14, grupo que engloba a las principales inmobiliarias españolas, y pronostica que la construcción destruirá 200.000 empleos el próximo año y aún más en el siguiente. No obstante, parte de ese empleo será asumido por otros sectores productivos, en particular los servicios, con lo que la pérdida neta de empleo bajará a 250.000 puestos de trabajo hasta finales de 2009.
En el caso del precio, el BBVA mantiene que en 2008 la vivienda subirá un 1,4 por ciento, aunque al cierre del ejercicio es probable que se estanque y a principios de 2009 se produzca una leve caída.
El euribor, a la baja
Además, en 2008 las familias se van a beneficiar de una caída del euribor, después de que en enero se disipen las tensiones de los mercados, que mantienen al índice en el entorno del 4,8 por ciento, su nivel más alto desde finales del año 2000.
En abril, cree el BBVA, el euribor volverá al 4 por ciento y en esa línea permanecerá todo el año. Con ello, la carga financiera de las familias tocará techo este año y experimentará una leve moderación tanto en 2008 como en 2009, cuando rondará el 17 por ciento de su renta disponible. La situación patrimonial de las familias españolas es, con todo, una de las más saneadas del mundo desarrollado.
Además, la contención de la principal referencia para los préstamos hipotecarios permitirá que la morosidad del sector financiero siga controlada en niveles históricamente bajos. Si meses atrás se daba por hecho que los créditos dudosos llegarían al 1 por ciento del total, desde el 0,65 por ciento actual, ahora el BBVA ve esa tasa "demasiado alta", toda vez que se ha comprobado que, incluso con desaceleración económica y más cargas financieras, las familias siguen pagando sus créditos.