Cuando el acuerdo sobre el techo del endeudamiento se halla en capilla, el Nobel de Economía de 2008, Paul Krugman, culpa de la situación 'in extremis' a la que se ha llegado a los republicanos, que "han tomado Estados Unidos como rehén".
El prestigioso economista acusa a los legisladores republicanos de "chantaje", en un artículo publicado por el diario El País, al forzar una virtual bancarrota del Estado con el claro objetivo de lograr "concesiones políticas que nunca habrían sido capaces de aporbar mediante la legislación".
Krugman asegura que los demócratas y, principalmente, el "conservador moderado" presidente del país, Barack Obama, hace tiempo que habían tratado de lograr un acuerdo sobre el techo del endeudamiento de EEUU con ofertas "extraordinarias" como la de aplicar drásticos recortes del gasto, endurecer los requisitos para acceder a la atención sanitaria o renunciar a la idea de subir los tipos impositivos a los ingresos más elevados.
Según el también profesor de Princeton, los republicanos rechazaron ese ventajosa propuesta porque deseaban más, una propuesta que "no sólo estaba muy a la derecha de las preferencias del votante medio, sino que estaba incluso un poco a la derecha de las preferencias del votante republicano medio".
"El problema que tiene ahora mismo la política estadounidense es el extremismo republicano", concluye Krugman, quien cree que en esta dura negociación no han sido igual de intransigentes los dos partidos.