
Barcelona, 27 jun (EFE).- El mercado de trabajo catalán continúa inmerso en plena crisis, no evidencia ningún signo de recuperación y todo hace pensar que mantendrá esta tónica durante bastante tiempo, según el diagnóstico que ha hecho hoy el sindicato CCOO.
La desaceleración de la destrucción de empleo es casi el único elemento positivo del comportamiento del paro durante todo el 2010, año que se cerró con un 18,1% de la población catalana en paro y 17.000 hogares en los que no entraba ningún ingreso, según se desprende del estudio elaborado por CCOO.
El estudio subraya que los motores económicos tradicionales de Cataluña, el sector industrial y la construcción, mantienen la tendencia negativa emprendida ya hace cuatro años y el resto no tienen capacidad para absorber los excedentes de mano de obra.
El comportamiento del paro en 2010 se caracterizó por una caída de la contratación indefinida, un empleo de baja cualificación y el aumento de los desempleados de larga duración (más de dos años) y de las personas que han agotado el subsidio del paro.
En 2010, las personas beneficiarias de prestaciones contributivas y asistenciales eran, al principio del año, del 61,6% y el 38,4%, respectivamente, proporciones que se equipararon a final de año.
En conjunto, la población parada sin cobertura económica aumentó en un 32,1% en el año 2010.
La directora del estudio y secretaria de Socioeconomía de CCOO, Cristina Faciaben, ha augurado que el mercado de trabajo mantendrá un comportamiento negativo al finalizar el 2011 y, probablemente, más adelante ya que, a su juicio, no se están poniendo las bases para recuperar la ocupación.
Los recortes en los servicios sociales y el empleo público aprobados por el gobierno de CiU en Cataluña no permitirán que el sector público pueda salir en ayuda del privado, que continúa inmerso en la recesión.
El estudio, que ha presentado CCOO en conferencia de prensa, señala también que la reforma laboral, aprobada precisamente hace ahora un año, se ha revelado "inútil" para crear empleo o para estabilizar el que ya existía, según Faciaben.
"Si no se da un cambio radical en la creación de empleo, la situación se agravará aún más porque continuará aumentando el número de personas que pierden el empleo", ha advertido la portavoz de CCOO.
Uno de los datos más preocupantes es que el 54% de los parados hace ya más de un año que no tiene trabajo, mientras que continúa muy alta la tasa de desempleo entre los más jóvenes.
Por provincias, Barcelona y Girona son las que presentan un nivel de actividad más alta, con una tasa que supera la media catalana, mientras que Tarragona y Lleida son las más afectadas por la falta de trabajo.
Por otra parte, la reducción de la actividad laboral ha hecho bajar también el índice de siniestralidad, y la mayoría de los accidentes laborales se registran "in itinere", lo que coincide con un aumento de la movilidad ocupacional.
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