
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha instado hoy a ampliar al G7, grupo de países que supervisa los mercados de divisas, y a reformar el papel del Fondo Monetario Internacional (FMI) para dar más estabilidad a la economía mundial.
Al inicio de un seminario del G20 sobre el sistema monetario internacional en China, Sarkozy, quien lidera al grupo de países ricos y en desarrollo este año, sugirió que es momento de fijar un calendario para que las monedas emergentes como el yuan de China entren a los Derechos Especiales de Giros (DEG), reconociendo su rol en la economía mundial.
"Las intervenciones concertadas son medios indispensables para salvaguardar nuestro sistema monetario internacional", ha señalado Sarkozy, refiriéndose a la intervención de miembros del G7 anteriormente este mes para estabilizar al yen.
Pero, para tomar en cuenta la inevitable internacionalización de las nuevas monedas, dijo Sarkozy que es hora de considerar un foro más amplio y representativo que el G7 para discutir temas de monedas.