
El dato de venta de viviendas nuevas de EEUU de febrero muestra la debilidad que permanece en el mercado inmobiliario del país, reforzando la negativa visión de la Reserva Federal, que ve un mercado "deprimido" a pesar de que la recuperación económica va ganando fuerza.
En concreto, las ventas de viviendas nuevas descendieron en febrero un 16,9% con respecto al mes anterior, hasta un total ajustado y anualizado de 250.000 casas, según ha informado hoy el Departamento de Comercio estadounidense. Si se compara con el mismo mes de 2010, la caída es del 28%.
El dato ha sido mucho peor de lo previsto por el mercado. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban una subida del 2,1% hasta las 290.000 viviendas.
La cifra de 250.000 viviendas es el nivel más bajo desde que se registran este tipo de datos, en 1963. A ello hay que sumar que los precios medios de venta cayeron un 13,9% interanual, de 221.900 dólares en febrero del año pasado a 202.100 dólares en febrero de 2011, mínimos desde diciembre de 2003, cuando el coste medio de una vivienda nueva era de 196.000 dólares.
Al menos, el dato de enero fue revisado al alza: la venta de viviendas nuevas se redujo un 9,6%, frente al 12,% calculado anteriormente.
Malos datos en el mercado inmobiliario de EEUU
La semana pasada se conoció que las viviendas iniciadas cayeron a su nivel más bajo desde abril de 2009, mientras que los permisos de construcción también marcaron mínimos de récord.
El mal panorama de la vivienda se completa con el dato de ejecuciones hipotecarias: ascendieron a 2,2 millones en enero, según Lender Processing Services. Es más, según recoge Bloomberg citando a la consultora CoreLogic, alrededor del 23% de los hipotecados tenían viviendas con un valor de mercado inferior al del préstamo que tienen contraído en el cuarto trimestre