París, 25 sep (EFECOM).- El proyecto de presupuesto francés para 2008, cuyos puntos principales fueron desvelados hoy por el primer ministro, François Fillon, ante diputados conservadores, prevé un déficit público del 2,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), una décima menos que en 2007, según ha trascendido.
El déficit del Estado previsto en el proyecto de ley de presupuestos que será presentado oficialmente mañana por el Gobierno es de unos 41.700 millones de euros.
Para 2007, la ley de presupuestos preveía un déficit de 41.996 millones de euros, pero podría ser rondar apenas los 39.000 millones.
El Gobierno ha aumentado hasta los 23.900, 300 más de los anunciados previamente, el número de puestos de funcionarios que no serán reemplazados el año próximo. Para 2007 se preveía suprimir unos 15.000 puestos.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, que ha propuesto a los más de cinco millones de funcionarios del país una "revolución cultural" y un "nuevo pacto" para refundar la función pública, quiere conseguir que en la legislatura se reemplace sólo uno de cada dos puestos de funcionarios que se jubilen.
El proyecto presupuestario para 2008 está elaborado sobre una previsión de crecimiento de la economía del 2,25% y una inflación del 1,6%, según ha trascendido.
Ante los diputado de su partido conservador gobernante, UMP, el primer ministro dijo que se trata de un presupuesto de "promoción social y económica".
Presentó como prioridades la enseñanza superior, el empleo y el poder adquisitivo, por medio del paquete de rebajas fiscales y fomento de las horas extraordinarias adoptado el pasado julio.
Y señaló que habrá ciertos esfuerzos a favor de la justicia y de la educación, que serán financiados con el control estricto del gasto público, que no debe crecer más que la inflación.
Con respecto a la Defensa y la ayuda al desarrollo, se prevé una estabilización del gasto.
El proyecto de presupuesto para 2008 es el primero de la presidencia de Sarkozy, quien sucedió a Jacques Chirac el pasado mayor, y ha sido ultimado en un momento de coyuntura económica poco favorable y sobre el trasfondo de una polémica sobre un supuesto plan de austeridad, desmentido por el jefe de Estado. EFECOM
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