MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El accionista minoritario de Astroc Felipe Izquierdo presentó hoy ante la Audiencia Nacional un recurso de apelación al auto del juez Baltasar Garzón que decretó, el pasado miércoles, el archivo de la querella contra el fundador y ex presidente de la inmobiliaria, Enrique Bañuelos, según confirmó Izquierdo a Europa Press.
Garzón tendrá ahora que decidir si admite o no dicho recurso. En caso de admisión y reapertura de la causa la defensa de Bañuelos podrá presentar alegaciones a los argumentos de Izquierdo que acusa a Bañuelos de un presunto delito de maquinación para alterar el precio de las cosas.
El querellante explicó que en caso de que prospere el recurso pedirá la "recusación de Garzón" por su "amistad manifiesta" con el abogado de Bañuelos y por "juzgar los hechos y emitir sentencia" en el contenido del auto de sobreseimiento libre de la causa.
Por el momento, Izquierdo no quiso concretar el número de accionistas minoritarios que finalmente se adherirán a la querella en el caso de que prospere. La semana pasada aseguró que 50 inversores habían solicitado su adhesión, por el momento sólo uno de ellos ha enviado al abogado el poder para pleitos necesario para ejercer su representación.
Garzón decretó el archivo de la causa dos días despues de tomar declaración a Bañuelos al concluir la "falta de consistencia" de la querella. En el auto explicó que "no se acredita ni aprecia" engaño ni intención por parte de Bañuelos de haber mantenido "artificial y engañosamente un valor irreal de las acciones al dar apariencia de obtención de beneficios mediante operaciones vinculadas que se habrían mantenido ocultas, y, que el descubrimiento de las mismas determinó el desplome de la cotización".
El juez consideró que Astroc cumplió con los requisitos de comunicación de las operaciones a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y avaló la legalidad de las operaciones realizas entre Astroc y su presidente, así como la venta de parte de las acciones de CV Capital, propiedad al 100% de Bañuelos, que redujeron su participación en la inmobiliaria por debajo del 51%.