El Producto Interior Bruto (PIB) de Francia registró en el cuarto trimestre del año una expansión del 0,6%, según las estimaciones del Banco de Francia, lo que supone duplicar la tasa de crecimiento de los tres meses anteriores.
No obstante, de confirmarse este dato, la economía francesa no cumpliría el objetivo de crecimiento anual, previsto en el 1,6%, ya que sería necesario un crecimiento de al menos el 0,7% en el último trimestre de 2010.
Sin embargo, el Ejecutivo de Nicolas Sarkozy organizó su presupuesto bajo la prudente hipótesis de que el PIB crecería un 1,5% en 2010, por lo que sus estimaciones de déficit y deuda no deberían verse afectados.
Lo que se complica es la capacidad de la economía francesa para alcanzar un crecimiento del 2% al cierre de 2011, una estimación mucho más optimista que la realizada por el resto de instituciones.
Francia revisó el pasado 28 de diciembre a la baja las cifras del PIB del segundo y el tercer trimestre de 2010. En concreto, la economía gala registró un crecimiento del 0,6 y del 0,3% en los respectivos trimestres, que representaba una décima menos de lo anunciado en ambos casos.
Por otro lado, el Banco de Francia ha informado hoy de que el indicador de confianza de la industria el pasado mes de diciembre se situó en 108 puntos, por encima de los 107 enteros del mes anterior.
