
Tres años después del comienzo de la crisis, las cosas no han mejorado en el mercado laboral. Más bien al contrario. De hecho, el número de parados registrados en los Servicios Públicos de Empleo a cierre de 2010, más de 4,1 millones de personas, es el mayor en toda la serie histórica, que arranca en 1996.
La evolución es fácil de observar también si se analizan los componentes del dato general uno a uno. Para empezar, se observa que tanto en 2007 como en 2010 el paro aumentó en los dos sexos, aunque la diferencia es que el incremento hace tres años fue más pronunciado entre los hombres mientras que el pasado ejercicio fueron las mujeres las que más pasaron a las listas del antiguo Inem.
Si se comparan las cifras, el número de mujeres en paro en 2007 ascendía a 1.244.408, mientras que en 2010 el número se elevó a 2.046.885, lo que supone un incremento en 802.477 mujeres sin trabajo.
En el caso de los hombres desempleados, en 2007 sumaban 885.139, frente a los 2.053.188 de el pasado año. Así, el aumento de hombres en paro es de 1,168,049 personas.
Al posar la vista sobre los contratos realizados a lo largo de estos dos años, la diferencia es también patente. En el conjunto de 2007, la contratación fue de 18.622.108, la mayor cifra de la serie histórica, mientras que los contratos acumulados a lo largo del año 2010 alcanzó los 14.417.150. Entre un ejercicio y otros se cuentan nada menos que 4.204.958 contratos menos.