MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE) alertó de que la subida del IVA aplicada en julio y una eventual alza de los impuestos especiales que gravan el alcohol entre un 5% y un 10% provocará la desaparición de unos 35.000 puestos de trabajo en el conjunto del sector, incluida la hostelería.
"Cualquier nueva subida impositiva sería un golpe muy duro cuyos efectos serían difícilmente asumibles por muchas empresas asociadas, especialmente por las pequeñas y medianas empresas que han sido las más castigadas por la crisis", subrayó el nuevo director ejecutivo de FEBE, Bosco Torremocha.
Según dijo, la crisis ha provocado la destrucción de 10.000 empleos durante 2009 y 2010 en el sector de bebidas espirituosas, que sostiene cerca de 250.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
A juicio de FEBE, esta situación "límite" en la que se están moviendo muchas empresas de la industria de las bebidas espirituosas podría agravarse "notablemente" ante cualquier nueva subida impositiva.
Torremocha denunció además la discriminación fiscal que actualmente sufre el sector en España, teniendo en cuenta, según dijo, que las bebidas espirituosas aportan más del 75% de los ingresos por impuestos especiales sobre alcohol, a pesar de representar el 28% del consumo de bebidas alcohólicas, mientras que la cerveza aporta el 23% cuando representa el 36% del consumo.
En concreto, el Estado recaudó el pasado año cerca de 900 millones de euros por impuestos especiales sobre bebidas espirituosas, un 11,1% menos que en 2008.
"Es importante entender que el incremento de los impuestos no sólo no genera mayor recaudación sino que puede provocar efectos negativos", resaltó el nuevo responsable de FEBE, quien consideró fundamental acabar con los "enormes saltos" en impuestos especiales, que, según dijo, suelen coincidir con épocas electorales y cambios de gobierno.
Torremocha abogó por una fiscalidad "más actual, razonable, moderna y menos discriminatoria" en relación con otros países de la Unión Europea.
CAIDA DEL CONSUMO POR LA CRISIS.
Asimismo, el nuevo director ejecutivo de FEBE resaltó la difícil situación por la que atraviesa el sector como consecuencia de la crisis, con una caída del consumo del 10%, tras el desplome del 11% en 2008 y del 12% en 2009, lastrado por el descenso de las ventas en la hostelería.
"Las previsiones para el cierre del 2010 no son muy halagüeñas y, aunque la caída es algo menor que en los dos años anteriores, hablamos todavía de un retroceso del 10%, que evidencia una situación complicada y preocupante para nuestro sector y otras industrias complementarias como la hostelería", subrayó.
Respecto al comportamiento de las ventas en los diferentes canales destaca el descenso en el consumo de todo tipo de bebidas espirituosas en hostelería, restauración y locales de ocio nocturno, principales canales de distribución del sector con un porcentaje conjunto del 70% de las ventas realizadas en España. El sector hostelero acumula una caída en torno a un 30% en los últimos dos años.
Para el próximo año, Torremocha confía en una recuperación del consumo o en el mantenimiento de las cifras del actual ejercicio, que se cerrará con un volumen de 202 millones de litros por un valor de 7.000 millones de euros.